Políticas

18/5/2017|1458

Santa Cruz: Ariel Ivovich, el otro Varizat


La agresión del actual presidente de la Caja de Previsión y su hermano contra dos abogadas y dos jubiladas a las que lesionaron, golpearon, amenazaron e insultaron no es un rapto de locura cualquiera, sino el emergente de un régimen acostumbrado a la impunidad y desesperado por la decadencia imparable de la camarilla kirchnerista.


 


En 2007, diez años atrás, otro funcionario, Daniel Varizat, atropelló a más de 20 personas con su camioneta. El grave atentado -que no registró víctimas fatales de pura casualidad- permanece impune. Su recuerdo sobrevuela ahora, cuando ante la inmensa presión popular, Ariel Ivovich fue detenido por la policía, porque aún no sabemos si el operativo policial-judicial es el puntapié de un acto de justicia o simplemente sirvió para que el provocador y su hermano, fueran “rescatados” del galpón donde se habían atrincherado, rodeados de manifestantes que acudían a repudiar la golpiza a las cuatro mujeres.


 


Ariel Ivovich es todavía hoy el presidente de la Caja de Previsión Social; en los últimos días se había enfrentado con los Jubilados Unidos, que ocupan el edificio de la Caja y acampan cortando la avenida San Martín frente a la sede. El era quien comunicaba a los jubilados los topes salariales que iban a cobrar en cada fecha. Su agresividad fue creciendo durante este conflicto, en la misma medida que la organización de los jubilados escapaba a su control y maduraba ostensiblemente en la lucha. Su ataque a las cuatro compañeras es el resultado de un régimen violento, que tiene una larga historia: desde el ataque de las patotas del gobernador Néstor Kirchner a las asambleas populares de 2001/2002, la militarización de la zona norte de la provincia contra las puebladas y luchas de los petroleros, el ya mencionado atentado de Varizat y la violenta represión frente a Casa de Gobierno en la madrugada del pasado 22 de abril.  


 


La eventual caída de Ivovich es un nuevo golpe al debilitado gobierno de Alicia K., que aún no se ha pronunciado al respecto, en medio de una enorme huelga estatal-docente-judicial y de nuevas marchas, cortes y ocupaciones de ministerios.


 


Las asambleas y mesas sindicales por localidad están debatiendo mandatos a llevar a un plenario de trabajadores, que ha sido denominado Cabildo Abierto, y que sesionará frente a la Casa de Gobierno el próximo 24 de mayo. En ese evento votaremos un programa y un plan de lucha para impulsarlo.


 


En medio de la pulseada entre los ajustadores del gobierno nacional y los ajustadores del gobierno provincial, el movimiento de lucha busca abrirse un camino de independencia de clase, para defender el salario, los convenios, los puestos de trabajo, la salud y la educación, e imponer el control obrero y popular sobre las finanzas públicas.