El miércoles 14 se desarrolló una jornada de lucha con el objetivo de visibilizar e impulsar toda una serie de reclamos que no son atendidos ni por el Ejecutivo local (PJ), ni por la oposición en el Concejo (Pro-Frente Progresista).

 

La jornada constituye la primera acción de un plan de lucha hasta poder conquistar todos los reclamos, entre los que se destacan: planes de urbanización, implementación de la ordenanza antidiscriminatoria, extensión de la línea agronómica del ejido urbano y el desplazamiento de Juan J. Mondino, actual coordinador del área de seguridad del municipio, investigado por las irregularidades en torno al asesinato de Silvia Suppo, ocurrido cuando éste era jefe de la policía local. 

 

Entre las organizaciones que participaron, además del PO, estuvieron Verdad y Justicia por Silvia Suppo, vecinos del asentamiento de Villa del Parque, así como centros de estudiantes.

 

En Rafaela, decenas de familias que viven en los asentamientos no tienen ni luz ni agua, el desempleo crece y miles de familias se ven obligadas a pagar alquileres elevadísimos, mientras que en los barrios más humildes crece el consumo de drogas y la violencia -especialmente hacia las mujeres.

 

Nuestra posición

 

Desde el Partido Obrero participamos de la jornada y de las asambleas que le dieron forma a esta actividad, señalando la complicidad de todo el arco político patronal – el Justicialismo, el Pro y el ‘socialismo’ de Lifschitz- en una política de ataque permanente a los intereses populares. Una clara muestra de esto es el acuerdo existente para votar un presupuesto que contempla un aumento en la tasa municipal del 30% y la continuidad de la precarización laboral en el municipio (hay 400 trabajadores con contratos de 6 meses).

 

Se trata entonces de poner en pie una fuerte organización independiente del Estado y sus partidos, que solo pueden ofrecer la profundización de la crisis en curso. Celebramos el agrupamiento y saludamos a todas las organizaciones sociales que trabajan con esta orientación.