A la velocidad de la luz, el intendente José Corral (UCR) aprobó el aumento del boleto solicitado por las empresas de transporte. De esta manera, el colectivo pasará a costar 9,60, un aumento del 25%. Sumado al aumento de mayo pasado se trata de un aumento de más del 70% -muy por encima de cualquier acuerdo paritario.

Por su parte, el PJ -que tiene mayoría en el Concejo- amenazó con llamar a sesiones extraordinarias para tratar el tema. El planteo era exigir que la potestad de fijar el precio del transporte vuelva al Concejo. Pero de ocurrir esto, lo único que cambiaría es que deberían compartir las responsabilidad del ajuste con el Ejecutivo. Justamente por eso y en una nueva muestra de impotencia política se quedaron en la amenaza.

Este nuevo ajuste profundiza la estafa a los contribuyentes que representa la política de transporte del intendente Corral. No solo avala sin chistar los aumentos exigidos por empresas que prestan un pésimo servicio, sino que ademas sostiene la farsa millonaria del tren urbano y no invierte un peso en mejorar las calles en los barrios populares, lo que lleva a que ante cada lluvia el servicio sea reducido.

Desde el Partido Obrero rechazamos este nuevo ataque a los bolsillos de los trabajadores. Exigimos la apertura de los libros contables para conocer los costos reales del servicio y la forma en que se han invertido los subsidios millonarios que reciben las empresas. Planteamos que los usuarios y los trabajadores del transporte sean quienes discutan tanto la tarifa como las frecuencias y recorridos del transporte urbano.