Con un Congreso militarizado por el despliegue de un millar de gendarmes, prefectos y policías de la Federal y el perímetro vallado, el gobierno procura blindar el robo a los jubilados de la movilización popular prevista a la hora del inicio de la sesión. Ayer por la tarde, la Gendarmería atacó con perros y carros hidrantes a un grupo de organizaciones apenas se acercaron al edificio.

Durante el transcurso del mediodía, ha continuado la afluencia de fuerzas represivas, alcanzando más de un millar y medio de agentes.

 

Desde el mediodía, un arco de organizaciones se concentra en los alrededores de la Cámara de Diputados contra esta avanzada, que supone el robo de 100.000 millones de pesos a los jubilados sólo durante 2018. Entre los numerosos convocantes se encuentran el Frente de Izquierda y el sindicalismo combativo (el Sutna -neumático-, los docentes de la AGD-UBA y de las seccionales opositoras de Suteba, entre otros); la CGT; la CTA y la CTA Autónoma; el “triunvirato de las  organizaciones sociales” (CTEP, CCC, Libres del Sur); y la Federación Universitaria de Buenos Aires (Fuba). El Partido Obrero concentrará desde las 12 en Sáenz Peña y Avenida de Mayo.

 

 

[AHORA] Las inmediaciones al Congreso bloqueadas al paso por prefectura y gendarmería #AlCongresoPorLosJubilados pic.twitter.com/f8OfzPXy8Y

— Prensa Obrera (@prensaobrera) December 14, 2017

 

 

La diputada nacional del Frente de Izquierda acompañó la marcha desde temprano. "Le sacan a los jubilados para pagarles a los acreedores internacionales y para seguir pagando la deuda externa".  

 

 

Claramente quien tiene que hacer este despliegue de fuerzas represivas no esta tomando medidas en favor de las mayorías @RominaDelPla #AlCongresoPorLosJubilados pic.twitter.com/qyGSEYY5aS

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Además hoy paran los docentes a nivel nacional y los estatales de ATE nacional y ATE Capital. La CGT, por su parte, obligada a convocar al paro en un cuadro de indignación popular, lo hará recién el día viernes en caso de que la reforma previsional se apruebe; es decir frente al hecho consumado –una medida de descomprensión. La burocracia cegetista pactó con el gobierno la reforma laboral y el desguace de los convenios colectivos de trabajo

El gobierno apuró la votación, que se realizaría el día 20, para una sesión “especial” (exprés) el día de hoy, en la que pretende también hacer pasar una reforma tributaria plagada de concesiones a los capitalistas. Cuenta con la complicidad de la  oposición patronal, entre los que se sumarían al voto favorable de los diputados que responden a los gobernadores de Santiago del Estero (Gerardo Zamora), Misiones (Hugo Passalacqua), Córdoba (Juan Schiaretti) y Tucumán (Juan Manzur), entre otros; el Bloque Justicialista de Bossio y la banca de Martín Lousteau votarán en contra pero garantizarán el quórum. Por su parte, el kirchnerismo –como el tero– puso el grito en el cielo contra la reforma pero la gobernadora santacruceña Alicia Kirchner estampó su firma en el “pacto fiscal” que parió esta confiscación.

 

 

[NOTICIA EN DESARROLLO]

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