Fuiste parte de la juventud que despuntó a la vida política durante el Cordobazo. La oscura noche de la dictadura te pisó los talones y te obligó, como tantos otros compañeros, a resistir casi desde el anonimato.

En la década del ’80, ya Santa Cruz te vio luchando por conformar y legalizar el Partido Obrero, con largas reuniones en tu casa.

Como trabajadora docente nunca dejaste de luchar, en el ´87, ´88 y ´89 contra la hiperinflación; contra el presentismo a partir del ´91, contra la ley federal a partir del ’93.

Ya jubilada, algunos pensaron que te ibas a dejar de joder…

Caleta Olivia te tuvo en el ´99 como la primera mujer candidata a intendente por el FUT-PO, retomando tu militancia política.

Y ya no pudiste parar, con los cacerolazos, contra la represión a los desocupados, por la libertad de los presos, por el presentismo al básico…

Te diste el gusto de desafiar a la Gendarmería en Termap, de ser parte del piquete docente en Los Perales, de cortar la ruta en Cañadón, de hacerle el aguante a los desocupados del Polo, de hacer que Vanesa termine 5º año, de ser congresal de Adosac y reconstruir la Lista Rosa, de que los jubilados docentes tengan voz.

Tus últimas actividades fueron una asamblea, unos mates con Norma y un asado con los compañeros…

De éstos necesitamos, de los imprescindibles, los que luchan toda la vida.

Hasta la victoria siempre, compañera.

FUT-PO de Santa Cruz