Políticas

23/9/1993|402

Sólo el FIT plantea derogar la ley de educación de Menem, el clero y el FMI

Docentes, estudiantes, padres:


El año pasado, justicialistas y radicales, riquistas y centroizquierdistas, “consensuaron” una ley de educación confeccionada por el clero, que privatiza la educación y la “descentraliza” en provincias y municipalidades sin presupuesto.


Contra esta “educación de mercado” salieron a la calle miles y miles de maestros, jóvenes y padres, en movilizaciones grandiosas que, sin embargo, no pudieron derrotar esa ley clerical-privatista, por la traición de la burocracia de la CTERA, capitaneada por Mary Sánchez.


El Frente de Izquierda y de los Trabajadores, el FIT, plantea derogar esa ley reaccionaria. Plantea la renacionalización de los establecimientos educativos, la estatización de los establecimientos confesionales y privados, la triplicación del presupuesto educativo, un salario docente igual a la canasta familiar (hoy es de $ 1.200) y que el Estado asegure la educación a toda la población hasta los 18 años.


Esta reivindicación elemental, usted, ciudadano no la va a encontrar en la plataforma del PJ o de la UCR. Pero tampoco en la de Rico o el Frente Grande de Chacho Alvarez y Solanas. Los llamados “opositores” posan de “enojados” y hasta de “duros”, pero sus programas o proyectos no se diferencian en lo sustancial de la patota menemista, y en especial en materia de educación.


El “carapintada” Rico es un hijo de la Iglesia. Chacho Alvarez y Solanas también: en su programa no plantean combatir el oscurantismo clerical, defender al laicismo o derogar la ley de educación reaccionaria. Andan con Mary Sánchez, la gran responsable de las derrotas docentes. No son, como dicen, uno de nosotros.


Los que el año pasado, por miles y miles, se movilizaron contra la ley de Educación están representados en el programa del FIT porque plantea la derogación absoluta de esa ley reaccionaria. Todo lo demás es verso, para confundir y engañar al pueblo.