Políticas

23/4/2009|1080

SUTEBA | Elecciones en Suteba: Se formó la Rosa-Fucsia-Lila-Gris-Marrón

Los ‘unitarios’ se faccionalizaron, los ‘sectarios’ logramos un gran frente antiburocrático en defensa de los Suteba combativos

En 19 días, entre las asambleas de memoria y balance y de elección de Junta Electoral del 1º de abril, y la presentación de listas para las próximas elecciones en el Suteba, se procesó una aguda lucha política entre quienes defendemos la extraordinaria experiencia de los Suteba combativos y quienes se unieron detrás del objetivo de destruirlos, en función del fin estratégico de construir una burocracia sustituta al yaskismo por las próximas décadas (El “espacio” Lila).

En Buenos Aires, la Lila fue un intento de poner en pie en la oposición docente la estrategia de “cavar trincheras con la burocracia”. Fue una iniciativa esencialmente impulsada por el PCR, a la que se sumaron, entre otros, el MST y los sectores sindicales ‘gremiales’ (¿?), en la provincia, encabezados por Enrique Gandolfo. Gandolfo finge creer que en medio de la mayor crisis del capital, los trabajadores pueden encontrar una salida circunscriptos a una lucha gremial.

Estos sectores colocaron a la cabeza de la Lila a la Azul y Blanca (PCR), que desde 2003 codirige el Suteba con su socio celeste Baradel. La ruptura del matrimonio Celeste-Azul y Blanca se produjo porque los ‘chinos’ advirtieron que no podían demorarse en abandonar un barco que se hunde.

El “espacio” lila, que abusó hasta el hartazgo de las palabras “unidad” y “pluralismo”, tuvo como principal propósito quebrar, dividir y marginalizar a los Suteba combativos. Se opuso a la política de actuar por fuera de los márgenes de la burocracia de Baradel, atacó los paros seccionales, las asambleas, y los plenarios de delegados con mandato protagonizados por los Suteba combativos y se ensañó con la expresión más profunda de este proceso, el Suteba La Plata. Con sus paros, sus ocupaciones y sus movilizaciones multitudinarias, el Suteba platense colocó al gobierno entre las cuerdas y llevó la disgregación de la celeste a la máxima expresión, al punto de que la burocracia ha retrocedido en La Plata como en ningún otro distrito.

En ocasión de las elecciones de Tribunales de Clasificación de fines del 2008, la Lila – impulsada por el tándem sojero PCR-MST, y por El Colectivo ‘gremial’ de Gandolfo –  logró su cometido, quebró a la Comisión Directiva del Suteba La Plata y armó en esa región una lista divisionista, la Lista 10.

Para estas elecciones de Suteba, el faccionalismo contra los sectores combativos de parte del PCR-MST-Gandolfo decidió dar un paso adelante. En La Plata se dispusieron a armar una lista sin los sectores combativos, sin Tribuna Docente y sin su principal dirigente, Amelia García, la secretaria general de ese emblemático Suteba. Incluso, proscribieron a algunos de sus propios socios de la Lista 10.

En La Matanza, el PCR-Azul y Blanca, que aún integra el consejo directivo del Suteba local con la Celeste, y que en las elecciones de 2003 y de 2006 permitió que la Celeste recuperara y mantuviera el Suteba seccional con la ayuda de sus votos, reclamó estar a la cabeza de la lista, es decir, la subordinación completa de toda la oposición combativa a esta variante de la burocracia sindical. Igual postura adoptó para Mar del Plata, seccional en la que se propuso marginalizar a la combativa Lista Violeta en caso de llegar a la conformación de una lista común.

En La Matanza, en La Plata y en Mar del Plata la oposición derrotó a la celeste en las elecciones de tribunales de 2008 ampliamente, y listas unitarias planteaban enormes posibilidades para un triunfo de los sectores combativos en esas seccionales. La política divisionista de la Azul y Blanca, del MST y del gandolfismo jugaron en contra de esa posibilidad.

El gandolfismo, por su parte, llevó esta política divisionista hasta el final. En el Suteba Bahía Blanca, Gandolfo se negó a integrar a su lista a nadie, y las diversas variantes gandolfistas de los demás distritos se negaron a realizar listas con los sectores combativos de la docencia. No hay nada que dividida más que los demagogos de la unidad.

Nuestra política
En las antípodas, el planteo de Tribuna Docente fue conformar listas unitarias de toda la oposición, para expulsar a la Celeste del sindicato, en defensa de los Suteba combativos y por más seccionales recuperadas; es decir, la conformación de un gran frente antiburocrático que respetara en su integración la realidad del desarrollo organizativo de cada agrupación.
En la lucha por lograr este frente, hoy representado por la lista provincial Rosa-Fucsia-Lila-Gris-Marrón, jugó un papel enorme el agrupamiento programático que constituimos la Violeta de Mar del Plata, la Lista Verde de Esteban Echeverría-Ezeiza, la Che Docente de la Matanza, la Azul y Blanca de San Martín y Tribuna, que planteamos esta perspectiva desde mediados de marzo pasado en un pronunciamiento común.

Por el contrario, la estrategia de pulverizar a la oposición de los Suteba combativos produjo el desgranamiento de la Lila en la provincia de Buenos Aires. Se produjo el fracaso de toda una estrategia para los Suteba, consistente en poner en pie una política de entendimiento entre la burocracia celeste y la oposición. Los faccionalistas se faccionalizaron. Como el apetito crece comiendo, se atragantaron.

En defensa de los Suteba recuperados, Izquierda Socialista, el FOS y el Mortero decidieron defender los frentes de lucha en la mayoría de los distritos, y por lo tanto, en algunos de estos casos, abandonando a la Lila.

En La Plata, se ha conformado una importante lista encabezada por TD con agrupaciones independientes, el PTS y CI.

En contrapartida, los campeones de “la unidad y el protagonismo” quedaron solos y aislados, y se dividieron: El tándem sojero PCR-MST va por un lado, y el bondi de Gandolfo por otro, con recorrido aparte. El PCR, el MST y Gandolfo son responsables, así, de partir a la oposición en tres, frente a la unión de la celeste con la verde, una agrupación kirchnerista de Libres del Sur.

En Matanza, se ha logrado integrar un gran frente antiburocrático de recuperación del Suteba, compuesto por todas las organizaciones opositoras. La Azul y blanca rompió ese frente, y va en lista aparte. Los votos que obtenga la Azul y Blanca serán funcionales a la Celeste, no obstante lo cual la lista antiburocrática encabezada por Romina del Plá tiene por delante la posibilidad de recuperar nuevamente el Suteba más importante de la provincia. Frentes únicos de la misma importancia se han logrado en General sarmiento y Lomas de Zamora.

En Mar del Plata, la Violeta agrupó a toda la oposición. En San Martín también se logró frenar la dispersión, pero igual el MST, el PC y el gandolfismo armaron su lista divisionista. En Esteban Echeverría-Ezeiza, la Azul y Blanca impidió un frente con la combativa Lista verde, aún a costa de poder perder ese sindicato a manos de la Celeste.

 También en Hurlingham se formó una gran lista unitaria, que puede disputar el sindicato a la celeste, encabezado por una dirigente histórica de la oposición, Nora Biaggio.La lista provincial que se constituyó alrededor de esta lucha política que se describe, integra a Tribuna Docente, Izquierda Socialista, el MAS, el PTS, la Violeta de Mar del Plata, la Verde de Esteban Echeverría, la Azul y Blanca de San Martín y la Che Docente de Matanza. Los ‘sectarios’ hemos armado, desde una línea de principios, una alternativa unitaria. Una alternativa para la docencia, detrás de la defensa de los Suteba combativos y de la consigna de que la actual crisis la paguen los capitalistas, los banqueros y los terratenientes.

Por su parte, el agrupamiento Lila, que nació con una pretendida extensión nacional, en Buenos Aires se ha disuelto. El FOS, el Mortero y la agrupación “4 de Abril” se han retirado de la lista provincial divisionista del PCR-MST, y Gandolfo sólo participa de ella como congresal, una manera elegante de retirarse, pero por sobre todo una manera de ratificar un oportunismo a ultranza con los sojeros.

La delimitación política que hemos impulsado con la Violeta de Mar del Plata, la Verde de Esteban Echeverría-Ezeiza, la Azul y Blanca de San Martín y la Che Docente de Matanza se ha coronado con la unidad de acción de los sectores combativos en defensa de los Suteba recuperados.

El 20 de junio, vamos por la defensa de los Suteba de Lomas de Zamora, General Sarmiento y la Plata y por la conquista de La Matanza, Hurlingham, Mar del Plata y todos los Suteba que se puedan recuperar, y por un masivo reagrupamiento de la oposición antiburocrática en toda la provincia.

Pero la conformación de este frente tiene un alcance mayor: Profundizar la lucha por la recuperación del Suteba, terminar con sus estatutos cárcel, echar a la burocracia, y desenvolver un plan de acción para reabrir las paritarias en función de defender el salario, las condiciones de trabajo y la defensa de la educación. Un paso más en la tarea de imponer una nueva dirección en Suteba, en defensa de la escuela pública y de la docencia. Una alternativa independiente del gobierno y de la patronal agraria para que, como plantearemos el próximo 1º de Mayo, la crisis la paguen los capitalistas, los banqueros y los terratenientes.

Equipo de Tribuna Docente