Desde una clara postura ideológica que entiende a las políticas culturales estatales como un negocio para terceros, se pretende convertir al Teatro Colón en una sala de alquiler. No se trata de la ya tristemente conocida fórmula de privatización, donde el Estado cede la administración y las ganancias a un tercero; se trata de un modelo todavía más perverso, porque el estado financia y presta recursos al servicio de los intereses de terceros.

El principal problema que tiene Macri para convertir el Colón en una sala de alquiler es la estructura laboral y funcional que tiene el teatro. Los cuerpos estables y su sistema de producción propia implican un teatro que funciona como una unidad de producción. Dicho de otra manera: todo lo que sucede en el escenario está garantizado por los trabajadores del teatro. La defensa y comprensión del modelo de producción propia ha sido siempre el elemento que permite la unidad de los intereses de los trabajadores del Colón.

Macri ha presentado en la Legislatura un proyecto de ley llamado "Creación del ente autárquico Teatro Colón" con la excusa de otorgarle a la institución "agilidad de gestión". Su verdadero objetivo es terminar de destruir el modelo de producción propia para poner en su lugar el de sala de alquiler. El proyecto le otorga plenos poderes a la administración, ignorando absolutamente las convenciones colectivas de trabajo. Esto no es casual, ya que estos elementos son el corazón de la producción propia. Tampoco es casual que se vuelva a anunciar el completamente paralizado proyecto del Master Plan ("restauración y puesta en valor del edificio"), porque un nuevo modelo institucional basado en el alquiler de la sala implica un nuevo tipo de estructura edilicia, que transforme los espacios de trabajo en espacios de lucro.

A partir de esta caracterización, los trabajadores del Teatro Colón reclamamos:

● Plena vigencia del modelo de producción propia, con cuerpos estables y rédito social

● Plena vigencia de las convenciones colectivas de trabajo

● Reapertura del edificio, en condiciones funcionales completas: con los talleres de producción y las salas de ensayo en óptimas condiciones para albergar al personal en normal funcionamiento, con la sala principal en óptimas condiciones con su plena capacidad de sostener la calidad de las producciones que el Teatro Colón históricamente produjo.

Maltés