Políticas

29/4/2004|848

Todos a Plaza de Mayo

Contra la masacre de Bush

La clase obrera que lucha contra los incesantes ataques de las patronales.


Que lucha por la defensa de sus conquistas.


Que denuncia el ‘gatillo fácil’, la represión, el encubrimiento de los delitos de los capitalistas por parte del Estado y que procura una verdadera democracia.


Que reclama “el derecho al trabajo” para todos.


Que aspira al mejoramiento material y al progreso moral para millones de explotados y para sus hijos.


La clase obrera que aspira a la emancipación de toda explotación, se enfrenta al peor de los crímenes del capital: la guerra y la masacre de los pueblos por parte del imperialismo.


La guerra imperialista reduce aquellas aspiraciones a cenizas.


Son guerras y masacres para reforzar la dominación de los explotadores y su insaciable búsqueda de beneficios económicos.


El capitalismo no puede sobrevivir sin la guerra y la masacre; lo ha demostrado a lo largo de toda la historia.


El imperialismo mundial ha ingresado en un nuevo período de crímenes contra los pueblos: ocupación militar en los Balcanes, ocupación y guerra en Irak y Afganistán, ocupación y guerra en Palestina, ocupación y guerra en Chechenia y el Cáucaso, ocupación militar en Haití, ocupaciones y guerras múltiples en Africa.


Bases militares crecientes, presupuestos militares crecientes, privatización de la guerra con centenares de miles de mercenarios.


Estos crímenes requieren dinero, que el capital arranca con la superexplotación de los trabajadores, con más dolores, con más lágrimas, con más sangre.


Para conseguir la paz hay que abatir al capitalismo.


Una clase obrera que no enfrenta de la forma más decidida a la guerra imperialista está condenada a la esclavitud permanente.


De pie, compañeros, contra los Bush, los Berlusconi, los Blair, los Sharon, los Putin.


De pie contra los Kichner y los Lula que se han comprometido a enviar tropas a Haití.


De pie contra los Kirchner de las petroleras y de la gasíferas –los pulpos que están en la primera línea de los impulsores de la guerra y la masacre.


Viva Fallujah.


Colaboremos para que Fallujah sea para Bush lo que Stalingrado fue para Hitler o Vietnam para Nixon


Vivan Gaza y Cisjordania.


Vivan los trabajadores que echaron a Aznar.


La emancipación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos.


Viva la Asamblea Nacional de Trabajadores Ocupados y Desocupados.