Políticas

15/4/2021

Robo de ganado

Tucumán: las vaquitas de Alperovich son ajenas

La justicia de Santiago del Estero allanó una de las fincas de la familia Alperovich. La familia posee más de 100 mil hectáreas en el noroeste de nuestro país.

Se viene investigando el robo de 4.700 vacas y terneros valuados en unos $450 millones. El empresario Luis Magliano, propietario de OCD (Oleos del Centro SA – en concurso de acreedores) y ex presidente de la Sociedad Rural de Jesús María, (renunció cuando se destapó el escándalo), fue contratado por cuatro empresas -San Eugenio S.A., el Tránsito S.A., La Permanencia S.A. y el 38 S.A.- para brindar el servicio de hospedaje y engorde de los animales. En enero estas firmas lo denunciaron por el “extravío” de los animales y se encuentra detenido junto a su colaborador Damián Manzanelli.

Las vaquitas circularon por las rutas del país en más de 200 camiones jaula sin ningún tipo de problemas. A raíz del allanamiento ordenado por los fiscales de la causa a “La Galesa SRL.”, propiedad de Alperovich y ubicada en Pozo Hondo, se constató que al menos 400 cabezas de ganado (Alperovich tiene allí un feedlot de 10 mil cabezas) corresponden a las firmas denunciantes. Sin embargo, estos resultados abarcan sólo al 30% de animales auditados hasta la fecha y se advierte que hay “sobremarcas” en el ganado. Según informa la justicia, no puede “todavía” establecerse si Alperovich actuó como coautor, cómplice o encubridor. Por supuesto, su hijo Daniel manifestó que fueron “estafados” por Maglione, quien le habría pagado una deuda con animales robados y pidió asistencia en el SENASA.

El accionar de los fiscales santiagueños fue bastante rápido en este caso para lo que suelen tardar en resolver otros problemas. Lo que sucede es que una de las firmas denunciantes, la compañía Haciendas San Eugenio, posee once establecimientos productivos en 91 mil hectáreas y más de 33 mil cabezas de ganado, un verdadero “monstruo” de la ganadería, y, su dueño, Eduardo Macchiavello, es uno de los CEO de Laboratorios Roemmers. Una pelea entre capitalistas destapa una olla de ganado en negro, abigeato, estafas reiteradas y quiebras fraudulentas.

Los propietarios de feedlots en Argentina aumentaron su producción en el último mes y amenazan al gobierno ante la posibilidad de avanzar con la prohibición de las exportaciones. Por un lado, la pérdida por ingresos de divisas de exportación del sector por unos USD 3.000 millones de dólares que el gobierno de Alberto Fernández necesita para seguir pagando la interminable deuda externa, como exige el FMI. Por el otro, la carne es uno de los productos que mayor porcentaje le otorga al Estado por retenciones, y lo más determinante, la amenaza de la pérdida de miles de puestos de trabajo que genera la industria (se perdieron 15 mil durante 2007-2015). Es por esto que los “nacionales y populares” defienden los intereses de los dueños de feedlots  y acuerdan un incremento sostenido de los precios de la carne, 6% en marzo y anticipan un nuevo “aumento cuidado” del 20%. El acumulado es de un 83% según el Indec de enero 2019 a enero 2021. Los precios del mercado hacen privilegiar la exportación (china principalmente) y dejar el mercado interno atado a precios inaccesibles para los más de 19 millones de pobres que generaron los que nos gobiernan desde hace décadas.

Alperovich y sus negocios lícitos e ilícitos vienen de la mano de los negociados con la exportación de carne, el abigeato y la explotación laboral en el norte. No podía ser de otra manera viniendo de parte de alguien que estuvo al frente de cuanto negociado se realizó en la provincia durante sus mandatos.