Un balance del MST

El MST (Alternativa Socialista, 2/7) reconoce que la Justicia electoral bonaerense “perjudicó al PO dividiéndole la boleta”.

Lo hace, sin embargo, al efecto de plantear que ellos también han sido perjudicados por dicho fuero judicial, porque “nos sometieron a una serie de artilugios que terminaron con la obligación de presentar una boleta en la cual se visualizaba preponderantemente y casi excluyentemente al MIJD” (ídem Alternativa). Y que esta boleta unificada del frente que ellos hicieron ‘voluntariamente’ con el MIJD de Raúl Castells, “obligados por la decisión de la justicia, como lo comprobamos a lo largo de la jornada, generó confusión y nos restó claramente identidad”.

Esta sería entonces -según el MST- una de las causas fundamentales del gran retroceso electoral que ha sufrido en la provincia de Buenos Aires (cayeron de 100 mil votos sumados separadamente entre el MST y el MIJD en 2007 a 39 mil ahora, unidos). Pero el MST privilegió colocar en su boleta bien grande “Nueva Izquierda en Unidad”. Tratando de mimetizarse a aquel frente renunciaron a destacar el nombre del MST. Si fuera cierta esta apreciación habrían sido víctimas de su propia ceguera.

Lo concreto es que en la Capital, sin dicho frente, y redestacando el nombre del MST, también retrocedieron abrumadoramente.

El MST retruca que se han levantado “ridículas interpretaciones como que nuestro correcto apoyo a los pequeños chacareros durante el conflicto agrario de 2008 nos habría restado votos, lo cual sería una absurda excepción cuando todas las alternativas identificadas con el conflicto agrario sumaron votos y éste fue uno de los arietes de la derrota de los K” (ídem). O sea que los “pequeños chacareros” no le dieron el menor valor al apoyo del MST a la Mesa de Enlace, o simplemente repudiaron ese apoyo.

Rafael Santos