Políticas

11/4/2013|1263

Un Cromañón sanitario se incuba en La Plata

Médico - Asociación de Profesionales Hospital San Martín, Médico - Cicop Hospital de Niños

Uno de los aspectos decisivos para afrontar una inundación es la atención sanitaria inmediata para la población afectada. Sin embargo, en La Plata, el colapso sanitario precede largamente al temporal. Los trabajadores de los hospitales de Niños, San Martín, Gonnet, Rossi, San Juan de Dios, nos manifestamos públicamente en los últimos meses, con apoyo de los pacientes y vecinos. Denunciamos la falta de insumos básicos como gasas, guantes, agujas, jeringas, medicación. La parálisis completa de las obras de infraestructura y el déficit de personal. Todo esto agravado por el presupuesto de ajuste, el más bajo para salud de los últimos años, que votaron Scioli, los K y la "oposición" del FAP-UCR y el peronismo disidente. La inundación impidió a muchos trabajadores salir de sus hogares. No fueron reemplazados por refuerzos sanitarios del Ministerio de Salud. Hubiera correspondido movilizar masivamente al personal de otras regiones sanitarias que no fueron afectadas por el temporal, lo cual exige una partida presupuestaria de emergencia.


Durante el corte de luz en el Hospital de Niños se salvaron las vidas de los pacientes por la acción inmediata de familiares y trabajadores del hospital, hasta que se pusieran en marcha todos los generadores eléctricos, lo que demoró en suceder. De la misma forma, se evacuaron salas de internación en el Hospital San Martín sin ayuda ni refuerzos del gobierno. Al día siguiente, el ministro de Salud provincial, Alejandro Collia, recorrió el Hospital de Niños y anunció por los medios que todo estaba bien. Fue el mensaje que reprodujeron los directores hospitalarios de la región.


En los hospitales se cayeron techos, el colapso de la infraestructura es completo. La falta de agua afectó la higiene, que es fundamental para controlar las infecciones. También el suministro de biberones a los bebés. No llegó ningún camión del gobierno para traer agua y alimentos en forma inmediata. Los inundados no llegan a los hospitales por sus medios. Hay que acercar la atención a los barrios y movilizar a quienes requieren al hospital. Pero los "hospitales móviles" son cinco, y muchos están parados por falta de personal. Los centros de salud no fueron reforzados tampoco. Son los residentes de los hospitales de la región los que cubren la atención y recorren las viviendas de los vecinos. Las inundaciones anticipan una crisis sanitaria aún más profunda, con enfermedades que se reproducen a través del agua, la mala higiene, las plagas, la precariedad habitacional y el frío. Es urgente el saneamiento ambiental, la recolección de basura, la eliminación de las ratas y vectores de epidemias.


Desde Tribuna de Salud con estudiantes y vecinos conformamos brigadas sanitarias que recorren el barrio con cuadrillas, para conocer las necesidades inmediatas, prevenir enfermedades a través de la organización popular y exigirle al gobierno que responda nuestras demandas. Hagamos asambleas en los hospitales y centros de salud para asegurar la asistencia de nuestros compañeros y pacientes. Organizar la solidaridad con los afectados por la catástrofe. Y poner en pie un movimiento de lucha de los trabajadores de la salud en asociación con los inundados. Los ministros Collia y Manzur, responsables del vaciamiento y encubridores, se tienen que ir. Tomemos en nuestras manos la defensa de la salud de la población.