Políticas

18/6/2009|1088

Un Fuentealba en General Rodríguez

A Bernal lo mató un régimen podrido y mafioso

En la mañana del viernes 5, el pueblo de General Rodríguez se vio conmovido por la muerte de Hernán Bernal, un reconocido docente y director de la escuela Javier Tapie. Centenares de docentes vecinos y alumnos se movilizaron a su entierro y luego a la Comisaría para exigir justicia por el asesinato del profesor.

Dos días antes de su brutal asesinato, Hernán había denunciado en la Comisaría y en el Consejo Escolar la falta de seguridad para los trabajadores y los alumnos del establecimiento, y el negocio de la droga en zonas aledañas.

La denuncia de Hernán se suma a otras tantas que se habían realizado docentes de la escuela. Solamente un padrinazgo, una zona liberada y protegida por la Bonaerense, por la Justicia y por el poder podría permitir esta situación.

La movilización popular

El lunes 8, más de 2.000 personas recorrieron el pueblo y fueron al Consejo Escolar. Aunque aquí desconocieron las denuncias realizadas por Bernal, uno de los medios locales (diario Acción) las colgaba en su sitio web. Ante la falta de respuesta, también por parte de la Intendencia, los manifestantes cortaron el Acceso Oeste de ambas manos durante unas cuantas horas. Cuando retornaron al colegio, en asamblea, los docentes votaron no comenzar las clases hasta que la renuncia de la inspectora jefe del distrito. La dirección del Suteba, en todo momento impulsó la desmovilización.

El martes 9, cuando docentes y padres llegaron al colegio para realizar la asamblea, se encontraron con la escuela destruida, vidrios rotos, matafuegos tirados y material didáctico destruido. Decidieron entonces ocupar el colegio y llamar a todo el pueblo de General Rodríguez a movilizarse el viernes 12, al cumplirse una semana del terrible crimen. La movilización contó con más de 3.000 manifestantes y numerosas voces que decían: “Acá tenemos a nuestro Fuentebalba”. La marcha no contó con la presencia ni de Suteba, ni de FEB, ni de ATE.

Reclamamos:

  • La dirección del Consejo Escolar y la jefatura distrital deben renunciar, al igual que la cúpula policial distrital y la cabeza máxima del distrito el intendente comunal.
  • Basta de impunidad, juicio y castigo a los responsables.
  • Para acabar con el distrito de la efedrina.
  • Reorganicemos el distrito sobre nuevas bases.

 

Jimena Lettieri