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El próximo 28 de junio serán las elecciones de intendente y concejales en Villa Carlos Paz. El intendente (de Carlos Paz Unido) Esteban Avilés adelantó las mismas para despegarlas de las nacionales y provinciales.

Este adelantamiento de las elecciones, que se repite a lo largo y ancho del país, significa la absoluta disgregación de los partidos tradicionales (tanto del PJ como de la UCR). El conjunto del arco político pretende adosarse a los distintos bloques. Vemos cómo a nivel nacional el kirchnerismo va a fondo con Scioli, un hombre de los organismos internacionales y las corporaciones; la UCR se fractura entre Macri y Massa, partidarios del ajuste. Particularmente en Carlos Paz, este reacomodamiento de los partidos tradicionales se expresó en los coqueteos de Avilés con el PRO, el alineamiento efectivo de Felpeto con el macrismo, el candidato Curvino (del PJ) que simpatiza con el radicalismo y pone "límites" personales con Felpeto y Avilés.

En el marco de la disgregación de las listas en Carlos Paz, en sintonía con esta crisis política nacional, el Frente de Izquierda busca construir una alternativa para un pueblo que se manifestó masivamente en contra de la impunidad, la hipocresía política y los malos manejos institucionales, aunque no inconscientes. Los casos de Andrea y Hernán (que aparecieron asesinados el 13 de marzo pasado, ver PO Nº 1.355 y 1.360) sólo son la punta del iceberg de las políticas de los gobiernos carlospacenses, que apuntan a ocultar los problemas debajo de la alfombra. Ni el municipio ni la policía, ni el gobierno provincial parecen dar respuestas a los reclamos que se repiten en el último tiempo.

Basta de impunidad: derogación del Código de Faltas, disolución del aparato represivo, destitución de los fiscales, funcionarios municipales y miembros de la cúpula policial que son responsables por omisión. El establecimiento de un aparato de seguridad bajo el voto y el control de los vecinos.

Al mismo tiempo que los partidos tradicionales hacen un cambalache de la política, el pueblo de la villa sufre permanentemente el costo de ser la ciudad turística de capitales privados. Esto se ve reflejado en los problemas ambientales a causa del desarrollismo que atenta contra la naturaleza. Está claro que este gobierno hace un especial énfasis en la imagen de la ciudad, con sus millonarias obras que incluyen adoquinamientos, "revaloraciones históricas" y "mejoramiento de fachadas" de zonas céntricas, colocación de farolas, etc.

En este modelo de desarrollo edilicio se apuesta por debajo del escritorio a la llegada de grandes grupos empresarios que le den a la ciudad un tinte aún más comercial.

Así también, a tres años de comenzada su gestión, Avilés y compañía se vanaglorian con la votación de la intangibilidad de la montaña, cuando parte de esos terrenos ya están en manos privadas y grupos empresarios. Dado que la ley estuvo en el cajón durante estos tres años de gestión, estamos ante uno más de los procesos legislativos que se aceleran en época de campaña.

Una de las problemáticas que no se ha tratado, ni en este ni en ningún gobierno previo, es la marginación de ciertos barrios de la villa, como es la zona del barrio Colinas, la "Vizcachera", el "barrio Gris". La policía y la municipalidad, haciendo la vista gorda compartida, se patean las responsabilidades, cuando se sabe abiertamente que existen negociados con la droga, las mafias del narcotráfico que utilizan a los jóvenes para que hagan el trabajo sucio, etc.

El tema de las obras de desagüe implica, por donde se lo mire, un negociado tremendo. Contó con un presupuesto de 1.582.000 pesos y, en el verano, con un poco de lluvia, se repitieron los problemas que la obra suponía solucionar, a costa del negocio de la empresa que se llevó más de un millón y medio del bolsillo de la población por una imitación de obra, ¡una verdadera estafa!

Convocamos a los trabajadores que luchan por la defensa del trabajo y del salario, a quienes se han organizado en defensa del ambiente, a los que se manifiestan en las calles contra la impunidad y la represión, a los que luchan por la vivienda, a sumarse activamente a nuestra campaña.