La desaparición de la docente Bety Argañaraz ha causado una verdadera conmoción en la provincia. Esto ocurrió una mañana cuando iba a su trabajo. Tiene 45 años.

Esta desaparición tiró abajo todo el discurso oficial relativo a la “seguridad ciudadana” bajo control. El gobierno pretendió ocultar el proceso de encubrimiento que envuelve el crimen de Paulina Lebbos. Anunció un plan para reorganizar el transporte público y terminar con la ilegalidad de los remises, lo que fue aprovechado para imponer un boletazo con la promesa de mejores servicios de colectivos y ómnibus. Ahora que la docente Argañaraz desaparece, luego de tomar un ‘remis’ ilegal, sale a luz que el sistema “trucho” sigue vigente. Es que este sistema sigue alimentando a la “Municipalidad paralela”.

“Tolerancia cero”

El gobierno plantea una política de “tolerancia cero”.

Desplegó miles de policías, sitiando a los barrios pobres. Fue a la caza de los luchadores de Los Ralos que resisten el aumento del boleto.

Tolerancia cero contra los trabajadores y completa impunidad para los negociados del poder. El gobierno dio el aval a los créditos del Banco de Tucumán (o sea, del Macro), para los planes del Instituto de la Vivienda y las contratistas. Pero vacía los bolsillos del pueblo con tarifazos, como los del agua, que acaba de aumentar un 15%, y el boletazo.

Crisis política

La desaparición de Bety Argañaraz se produce en un momento de enorme tensión dentro del gobierno. Alperovich está apurando una definición del vice, Juri, y de sus seguidores para que avalen su plan político de copar la reelección de 2007.

Alperovich pretende imponer el diseño de las listas y crear partidos provinciales y municipales para acoplarlos a sus candidaturas, y reforzar por esa vía el futuro control de la Legislatura y los concejos. La Legislatura no funciona desde hace semanas porque están en juego las porciones de poder del Estado que cada camarilla va a conservar.

Se plantea la alternativa de la ruptura del PJ. En ese caso, Juri reuniría en un frente desde los bussistas hasta el centroizquierda.

Estas disputas tienen paralizado a todo el arco de partidos, que están a la espera de una definición de la interna del oficialismo.

La reacción popular

Las que no esperan son las masas populares.

Todos los martes, miles marchan para reclamar el castigo a los responsables de centenares de crímenes impunes. En esas marchas confluyen los reclamos por todos los viejos y nuevos crímenes, y se han transformado en caja de resonancia de todos los reclamos sociales.

Para el martes 29 de agosto, al cumplirse seis meses del crimen de Paulina, se ha convocado a una gran Marcha a la Plaza Independencia.

Contra la impunidad. Que se vayan todos los encubridores, por el juicio y castigo a todos los criminales.

Contra todas las disposiciones que cercenan los derechos y las libertades democráticas (de organización y expresión) del pueblo trabajador. Por la disolución del aparato represivo.

Contra los tarifazos y el boletazo. Por una reorganización del transporte público bajo control obrero y de las asambleas populares de usuarios.

Por la reincorporación de los artistas despedidos. Por un plan cultural bajo control de los artistas y trabajadores de la cultura.

Basta de contaminación: por comités obreros y populares electos en asambleas populares de control ambiental.

Por el trabajo, por el salario, por las libertades.