El 14 de abril realizamos la primera asamblea virtual del Centro de Estudiantes de Ciencia y Técnica (Cecyt) de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam) en el marco del aislamiento obligatorio. Con la participación de más de 40 estudiantes, pusimos en común los problemas que atravesamos a un mes de la suspensión de clases presenciales. Se discutió acerca de la forma de evaluación, el crecimiento en la deserción con la virtualidad, y la sobrecarga de trabajo de los docentes.

La virtualidad

La asamblea votó en primer lugar el rechazo a la toma de decisiones de manera unilateral y a espaldas de la comunidad educativa por parte de un comité compuesto por 7 miembros de la gestión de la universidad, sin incidencia de estudiantes y docentes, evidenciando constantemente sus límites. Exigimos que sea un comité de crisis con participación paritaria de estudiantes, docentes, no docentes e investigadores quien discuta y decida sobre la cursada virtual, las evaluaciones, etc.

A su vez, exigimos un relevamiento de toda la comunidad educativa de la Unsam, en cuanto a la posibilidad de acceso a conectividad y a las clases virtuales, en contraposición con la actual encuesta optativa, girada por redes sin alcanzar al conjunto de les estudiantes inscriptos. A este relevamiento exhaustivo debe estar sujeto el otorgamiento de los recursos tecnológicos que dispone la universidad.

En este sentido, enviamos la exigencia al decanato y a la secretaría académica de que se flexibilicen los pedidos de prórrogas; de que las cursadas que vencían en el período de cuarentena se extiendan un año más para posibilitar a lxs estudiantes a dar el final; y de que las materias prácticas (por ejemplo Tecnicatura en diagnóstico por imagen) que no se están cursando y abrían solo el primer cuatrimestre, abran el segundo, con instalaciones en condiciones acordes a un eventual levantamiento de la cuarentena.

Los recursos de la Unsam frente a la pandemia

Fue parte de la deliberación colectiva dónde se colocan los recursos materiales e intelectuales de la universidad. La asamblea se pronunció porque los mismos se pongan al servicio de las necesidades populares frente a la crisis sanitaria, a través de la centralización estatal de todo el sistema de salud público, privada, obras sociales y laboratorios bajo control de trabajadores.

La situación del Hospital Belgrano en San Martín, a menos de cinco kilómetros de la Unsam, es una muestra del sistema de salud desfinanciado y descentralizado: trece trabajadores infectados y posiblemente diez casos más, mientras las autoridades del hospital pegaban carteles indicando que “en este sector no hacen falta barbijos”.

Precarización de la juventud: depósito ya de la beca de Unsam y aumento de la progresar a $10.000

Otro de los puntos de debate fue la precarización laboral de la juventud, cobrando monedas, sin cobrar en absoluto o trabajando en condiciones de exposición al contagio. Por eso la asamblea votó impulsar la campaña del CECyT por el aumento y entrega inmediata de la beca de la Unsam, y la exigencia al Estado de aumentar la Progresar a 10.000 pesos y del seguro al parado de $30.000. A su vez, nos pronunciamos en apoyo a la lucha de los trabajadores contra los despidos, las rebajas salariales, por condiciones de higiene donde se encuentran trabajando, así como contra la represión estatal y el ciberespionaje.

Organicemos los reclamos y la fuerza de todes les estudiantes de la Unsam

La asamblea y sus resoluciones son un impulso para la organización estudiantil en CyT.

Cabe destacar que este conjunto de resoluciones impostergable, lamentablemente, fue ignorado por la agrupación La Sábato, cuyos dos secretarios no mocionaron nada y se abstuvieron a la hora de votar, dándole la espalda a los reclamos de les estudiantes.

Pero no nos debe sorprender, ya que donde dirigen la agrupaciones vinculadas al gobierno y a las autoridades dirigen, les estudiantes encuentran a su herramienta gremial paralizada. Desde La Martí (Somos Unsam) en Humanidades pasando por Construyendo Idaes en Sociales hasta el FUNK (Frente Universitario Néstor Kirchner) en Política y Gobierno: limitarse a replicar los comunicados unilaterales de las autoridades y embellecer la virtualidad a través de sus redes. La misma orientación lleva Nuevo Espacio (Cambiemos) en Economía y Negocios.

La política que impulsamos desde La Caldera en la conducción del CECyT, y que fue ratificada por esta asamblea, se basa en fomentar el debate entre les estudiantes, poniendo los problemas sobre la mesa, y organizándonos entre estudiantes, docentes y no docentes, sin atarnos las manos al gobierno ni a las autoridades, para que la continuidad de las clases bajo la modalidad virtual no se lleve puesto a nadie. 

En este sentido, llamamos a los centros de estudiantes de la universidad a realizar asambleas en sus escuelas, votar un pliego de reclamos y unificarlos mediante una reunión de las comisiones directivas de los centros de estudiantes. Hay que unir los reclamos y fuerzas de todos los estudiantes de la universidad.