Urtubey anuncia un hipotecamiento colonial y usurario contra los trabajadores salteños

El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, anunció con bombos y platillos un “Plan del Bicentenario de la Independencia”, eufemismo para contrabandear un endeudamiento de hasta 350 millones de dólares, que representará una estafa de envergadura histórica y un hipotecamiento colonial y usurario


El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, anunció con bombos y platillos un “Plan del Bicentenario de la Independencia”, eufemismo para contrabandear un endeudamiento de hasta 350 millones de dólares, que representará una estafa de envergadura histórica y un hipotecamiento colonial y usurario.


La reivindicación que hizo Urtubey del pacto con los fondos buitre así lo delata porque esto fue la llave que abrió la posibilidad de semejante endeudamiento, omitiendo que la festejada “vuelta a los mercados” no evitó que la Argentina se endeude a tasas usurarias, propias de una economía en bancarrota. Las tasas que deberá pagar Salta serán aún mayores (arriba del 8%, similar a las que se pagan actualmente por la deuda previa al arreglo buitre). Para colmo, garantizan jurisdicción internacional para eventuales litigios, reeditando potencialmente la extorsión de jueces como Thomas Griesa y de usureros extranjeros como los buitres.


Unidos por la deuda y en la estafa al pueblo


Este hipotecamiento debe ser avalado ahora por la legislatura y el oficialismo busca un tratamiento exprés. Romeristas, macristas y massistas sólo atinan a pedir precisiones sobre las obras y los plazos de realización, compartiendo la política oficial. La disposición de Urtubey, de que las intendencias determinen el uso del 20% de este endeudamiento, atenuó las pugnas por recursos que ponían en crisis su propio bloque, a la vez que disciplinó a la oposición patronal.


El proyecto del Ejecutivo no determina plazos de endeudamiento y anuncia un plan genérico de obras sin determinar cantidad, localización y plazo de realización. Urtubey aprendió muy bien con el Fondo de Reparación Histórica para el norte provincial, creado en 2008, que es mejor no dar mayores detalles, ya que de las 175 prometidas sólo se completaron 86 y se agotaron los recursos. Como ya pasó con el FRH, esta hipoteca no significará ningún plus de obras, sino que reemplazará la obra pública regular que debería fijarse en los presupuestos anuales. El Banco Macro y la patria contratista serán nuevamente los beneficiarios principales de esta deuda y las obras para la población seguirán siendo una promesa.


Salvavidas de plomo


En sólo cinco meses la deuda pública provincial se multiplica en más de un 240%. Urtubey endeudará a los salteños por más de 7.200 millones de pesos, pues ya se tomó un crédito de Nación por 800 millones y emitió letras de tesorería por 1.400 millones. Todo a tasas variables y superiores al 38%. Esta es su salida a una dislocación económica causada por su propia política de eximición y subsidios al capital. Las medidas del macrismo que Urtubey reivindica, produjeron un agujero fiscal de 1.500 millones y ahora la devolución del 15% de coparticipación adeudada desde hace al menos 15 años por Nación, no será una recuperación real de fondos y ni un plus de recursos, apenas alcanzará a cubrir una parte del actual déficit fiscal.


Para pagar esta nueva hipoteca el gobierno intentará hacer “caja” a través de la profundización del ajuste que ya está en curso con despidos en los municipios, parate de la obra pública, tarifazos e impuestazos.


Los parlamentarios del PO rechazaremos esta política antiobrera de endeudamientos usurarios, que ya fracasó en el pasado para dar salida a la crisis que sufre la provincia y el país. Plantearemos la necesidad de un gravamen extraordinario y de emergencia a los grandes grupos capitalistas que operan en la provincia y que obtuvieron ganancias multimillonarias sin mover un dedo, gracias a la devaluación y la eximiciones impositivas y subsidios que prohijaron Mauricio Macri y Urtubey.