Políticas

29/8/2019

Vamos por una gran campaña del FIT-Unidad en Tandil

A pesar de la aplastante derrota del Macrismo a nivel nacional y de su evidente derrumbe político, a nivel local Juntos por el Cambio salió vencedor de las PASO con el 52,43% de los votos. El radical y ya cuatro veces intendente Miguel Lunghi logró superar tanto a su competidor interno Marcos Nicolini como al candidato del Frente de Todos, Rogelio Iparraguirre, quien, a pesar de haber hecho una buena elección y a diferencia de sus candidatos nacionales, que ganaron ampliamente, obtuvo el segundo lugar con un 33,53%. Casi 20 puntos por debajo del oficialismo.


La política de los partidos patronales


Al igual que sucede a nivel nacional, los principales dos candidatos en disputa son partidarios de pagar la deuda ajustando al pueblo:


El gobierno de Lunghi ya ha demostrado en sus 16 años al frente del municipio que gobierna para los terratenientes de la zona y los especuladores de la industria inmobiliaria. Mientras se dedica a la creación de espacios turísticos y al embellecimiento del centro y los barrios residenciales, los precios de los terrenos y de los alquileres aumentan exponencialmente, dejando a mucha gente en la calle o viviendo sin llegar a fin de mes; mientras desaloja a aquellas familias que, por necesidad, ocupan algunas de las miles de viviendas desocupadas y mientras oculta a los vecinos de la ciudad cualquier información relativa a terrenos fiscales, varios de sus funcionarios han sido denunciados ante la justicia por, justamente, ocupar terrenos municipales. Además, ha permitido la venta de lotes y la construcción de casas sobre las sierras, cuya defensa es una lucha histórica de los vecinos de la ciudad. A la vez que brinda tantos beneficios a los capitalistas locales, tiene a los empleados municipales en condiciones de higiene deplorables y en condiciones laborales de una precariedad absoluta -desde contratos temporales y sueldos de miseria hasta el abandono casi total del mantenimiento de los lugares de trabajo. Otro de los temas fundamentales es el transporte público, que cada día está más caro y genera ganancias enormes para las empresas que ganan su licitación. A esto se le suma la negativa a instalar el sistema nacional SUBE y los beneficios que su implementación conlleva -entre ellos el boleto gratuito para universitarios y jubilados-.


El candidato del Frente de Todos, Rogelio Iparraguirre tampoco representa un verdadero cambio de rumbo en la administración de la ciudad, sino, por el contrario, la continuidad del mismo: respecto a la problemática del transporte público, su planteo es subsidiar a los empresarios del transporte para bajar el precio del boleto -es decir, que la diferencia de precio la pague el estado con la plata de los vecinos-.


Frente a la construcción sobre las sierras, su propuesta de senderos públicos parte de la base de negociar con los dueños de aquellos terrenos que sean privados -es decir que no cuestiona en ningún momento la privatización de semejante patrimonio natural- (El Eco, 27/08/2019). En esa misma línea, "planteó cambios dentro de la legislación del Plan de Ordenamiento Territorial para permitir la edificación en parcelas afectadas como la Zona de Interés Especial Urbanístico […] Este caso resulta “doblemente grave” para la organización dado que implica “abrir la posibilidad de construir en un área serrana" (El Eco, 06/10/2018).


Respecto de las condiciones laborales, basta con mencionar que el máximo candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, se ha pronunciado en favor de la reforma laboral de hecho -mediante la flexibilización de los convenios colectivos- y que la burocracia sindical del sindicato de trabajadores municipales es peronista y se ha llamado a silencio ante varios ataques a los bolsillos de los obreros, como, por ejemplo, frente a la quita de horas extras.


Nuestra tarea


El Frente de Izquierda y de Trabajadores – Unidad, con el Partido Obrero a la cabeza, quedó en cuarto lugar -después del candidato de Lavagna (4,68%)- y logró mantener su base electoral poco superior al 2%, superando la restrictiva barrera del 1,5% y confirmando un núcleo duro de más de 1600 votantes.


Nuestra campaña consistió en pegatinas callejeras, charlas en bares con candidatos nacionales, mesas de agitación política, discusión con los vecinos de la ciudad y una serie de entrevistas en los medios locales. Agitamos nuestro programa nacional de 20 puntos y una plataforma local con nuestras propuestas. Todo esto teniendo como eje principal la necesidad de una salida de fondo de los trabajadores y de la izquierda a la crisis que tan duramente azota a los trabajadores y a los sectores populares del país.


La izquierda, en Tandil, debe dedicarse, por un lado, a denunciar que ambos candidatos defienden los intereses de la misma clase social y, por el otro, explicar que la única salida posible a la crisis es de la izquierda y los trabajadores. Para ello, contamos con una plataforma local, armada colectivamente en base a la discusión de años con los vecinos, con 10 puntos clave a trabajar que dan solución a, entre otros, los problemas ya mencionados.


Debemos trabajar por organizar a las barriadas y a los desocupados por trabajo genuino, vivienda y mejora de los barrios (asfalto, cloacas, gas y agua caliente, etc). La agitación en la universidad y en los distintos centros de estudio de la ciudad es fundamental para desarrollar un movimiento independiente y de lucha.


Otro de los movimientos al que tenemos que acercarnos es al de mujeres -hoy en día cooptado, en su mayoría, por Patria Grande- para acompañar y orientar las luchas con una perspectiva socialista.


Urge ponerse a trabajar y a planificar cómo superar con éxito cada uno de estos desafíos que tenemos por delante. Adelante, compañerxs!