Políticas

26/5/2017

Vicente López: cómo enfrentamos la inseguridad

@federicodeco


Ante la indignación popular que causó el conocimiento público de redes de tratas y denuncias de intentos de secuestro de niñas y adolescentes en la Zona Norte del Gran Buenos Aires, la Red Solidaria de Juan Carr y otras ONG’s lanzaron una convocatoria por redes sociales para una concentración en el distrito, frente a la iglesia “Nuestra señora del huerto de los olivos”.


 


En la ocasión,  Carr declaró: “estuvimos conversando con (el intendente) Jorge Macri, quien nos ofreció reunirse para organizarnos juntos” (Que Pasa, 13/5).


 


A fines del 2016, Carr firmó un contrato con Jorge Macri para la formación de líderes sindicales y políticos del PRO en la universidad de Vicente López.


 


La lucha contra la inseguridad y la violencia contra la mujer, sin embargo, exigen una organización independiente del Estado que la patrocina. ¿O nos olvidamos, por ejemplo, del caso de la banda integrada por policías en Munro (deschavada en 2015) que operaba a partir de un pool de la localidad y se dedicaba a la comercialización de estupefacientes, extorsión a comerciantes, etc.?


 


¿Podemos dejar la seguridad en manos de este aparato descompuesto y coludido con el poder político? En oposición a ello, planteamos la apertura de los libros de las comisarías y su control por parte de las organizaciones de derechos humanos. A la vez, planteamos la conformación de un consejo autónomo de la mujer electo por el voto de todas las mujeres a partir de los 13 años.


 


Las ONG son financiadas por el Estado y por un sistema de “donaciones” privadas que es explotado por los grupos empresarios para evadir impuestos y blanquear dinero. No responden a un legítimo interés social, sino al que las financia.


 


En el caso de la ONG de Carr, nació financiada por el Estado durante la brutal desocupación de los años ‘90, bajo la campaña frío cero, para luego ir mutando de consigna según el gobierno de turno.


 


Sólo la organización y movilización independiente de los trabajadores puede darle una salida al problema de la inseguridad y la violencia contra la mujer.