Salimos todos los gremios estatales, yo pertenezco a los municipales de Capital. Salimos a la calle para impedir que se votara la nueva ley de jubilaciones de Córdoba.

Eramos muchos gremios en la calle, militantes y activistas de los gremios que tuvimos un fuerte enfrentamiento con la policía, porque nosotros tratábamos de llegar a la Legislatura para ser escuchados. Nos encontramos con un operativo brutal, estaban muy preparados para impedirnos llegar y que lográramos impedir que se tratara ese día y que se abriera la posibilidad de fueran escuchadas nuestras diferencias con esa ley.

Esa ley ataca las jubilaciones futuras y no sólo, como dice Schiaretti, se trata de un recorte a las jubilaciones de más de 5 mil pesos. Esa es su propaganda. La ley cambia el cálculo de las futuras jubilaciones, no tendremos más el 82% móvil ni el sueldo testigo que tenemos ahora, por lo que vamos a cobrar mucho menos.

Los dirigentes sindicales nos sacaron a la calle sabiendo que la ley se aprobaba y consiguieron con distintas maniobras desconcentrarnos. Para ellos, la movilización era algo simbólico, daba la idea de que tenían un acuerdo en dejar pasar la ley. El enfrentamiento con la policía corrió por cuenta de los activistas y trabajadores de base de los gremios; sentíamos una impotencia tremenda de no poder llegar a la Legislatura.

Trataremos de seguir movilizados, no hay otra forma de parar la ley que en la calle. Buscaremos realizar con los compañeros asambleas, pronunciándonos contra la ley y organizando la lucha.