Salud

19/8/2020|1603

Los trabajadores de la salud, víctimas de la pandemia

Aumento de los contagios, flexibilización de protocolos y falta de personal.

El viernes pasado, Alberto Fernández, en conferencia de prensa, junto al gobernador Axel Kicillof y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, extendió la “cuarentena” hasta el 30 de agosto. El Presidente culpó de los contagios a los encuentros sociales, un diagnóstico que encubre la responsabilidad de las empresas, que infringen sistemáticamente los protocolos. Sobre estas, el Presidente afirmó que “han funcionado maravillosamente bien”, algo contrario a la realidad.

Los números arrojan que el grueso de los contagios se concentran en la zona del Amba, con 269.451 el 88,06% del total (Ministerio de Salud de la Nación, 19/8). Con la particularidad de que en la provincia de Buenos Aires se ha superado la duplicación de casos, aumentó 114% en los últimos 25 días. Lo mismo que en muchas provincias, como Mendoza (379%), Santa Fe (295%), Córdoba (193%), Río Negro (157%) y Jujuy (270%).

Provincia de Buenos Aires

La última semana, la gremial bonaerense Cicop, de profesionales de la salud, denunciaba que son 10.000 los trabajadores del sector contagiados por coronavirus, sobre un total de casi 200.000 infectados en la provincia. Ya son casi 40 los profesionales del área fallecidos. Hay que sumarle los médicos y enfermeras que están aislados por haber tenido contactos estrechos con pacientes contagiados y un faltante de 2.500 profesionales entre médicos, enfermeros y camilleros.

Cicop advierte que la principal preocupación en la lucha contra la pandemia va siendo la saturación del plantel de profesionales sanitarios, que amenaza con provocar el colapso del sistema de salud, incluso antes de que se consume la ocupación total de las camas de terapia. Una situación por demás crítica, cuando en muchos hospitales del conurbano la ocupación de las camas de terapia está cerca del 100% y en un promedio general que supera el 75% en dicha zona.

Ciudad Autónoma de Buenos Aires

Por su parte, la Asamblea de Residentes y Concurrentes publicó un nuevo relevamiento de la situación de los hospitales públicos de la Ciudad, donde denuncia que “más del 40% de los efectores cuenta con el 100% de camas ocupadas”, lo que demuestra el colapso sanitario que Horacio Rodríguez Larreta y su ministro de Salud, Hernán Quirós, pretenden esconder.

Otra de las denuncias se refiere a la falta de personal en los efectores de salud, denunciando que el 50% de los efectores relevados no incorporó profesionales en terapia intensiva. Esto conlleva una sobrecarga a los trabajadores y, particularmente a los residentes, quienes en un 85% no perciben ni un centavo por cubrir guardias. Mientras tanto, el gobierno de Larreta mantiene a miles de trabajadores concurrentes trabajando de manera gratuita, sin derechos laborales y expuestos al contagio.

Protocolos y cuidado del personal

Los residentes y concurrentes también mencionan la falta de actualización de protocolos y capacitaciones para el personal que se encuentra trabajando en la primera línea, sin condiciones adecuadas. Sobre la base de una flexibilización de los protocolos, orquestado por el Ministerio de Salud nacional, se dejó de hisopar a los trabajadores contagiados, luego de cumplir los diez días de aislamiento. El 68% de los trabajadores encuestados, sobre los 17 hospitales en que se recabó información, plantea que los protocolos son insuficientes y el 21% que no hay protocolos que hayan mejorado la atención y el cuidado, tanto del personal como de los pacientes. Por otro lado, el 78% plantea que no se tomaron nuevas medidas o cambios de protocolo en el último mes ante el aumento de contagios.

A su vez, los problemas de infraestructura y las limitaciones para dotar los efectores de salas de descanso acrecientan la exposición al virus. El 39% plantea que no se mejoraron los espacios de descanso y el otro 39, que fue de manera insuficiente. Lo mismo con la cohortización del personal, que garantiza la rotación para disminuir las posibilidades de contagio.

Todo este cuadro de la situación ha generado un ascenso en los contagios en el personal de salud, y ha puesto nuestro país en el podio de países con mayor tasa de personal infectado. En las últimas semanas se han reportado los fallecimientos de varios compañeros, entre los que se encuentran una médica neonatóloga del Hospital Rivadavia y un enfermero del Hospital Durand.

Nuestro planteo

El Partido Obrero reclama la inmediata centralización del sistema de salud y un impuesto extraordinario a los capitalistas para financiar la cobertura completa del personal sanitario, los insumos de protección, la ampliación de las camas y unidades de terapia intensiva, el equipamiento de los hospitales y un aumento salarial a los trabajadores, que parta de la equiparación de los sueldos con la canasta familiar.

La centralización del sistema de salud sería la única manera de disponer de todas las camas de manera unificada, para poder empezar a hablar de porcentajes y disponibilidades. La disparidad en recursos que posee el sector privado por encima del público debe ser administrado por el Estado nacional y un comité de sanitaristas y trabajadores.