Estudiantes de Enfermería del Instituto Durmare de las sedes de Las Lajas y Zapala triunfaron en la lucha que iniciaron hace más de un año, luego de haber quedado sin cursadas ni prácticas para finalizar su carrera y recibir sus títulos.

Se trata de distintas cohortes con 65 estudiantes, que incluso varias tuvieron su colación de grado, pero no tenían respuesta alguna de parte de la institución sobre el inicio de sus prácticas y mucho menos sobre la entrega de sus títulos. A más de un año las y los estudiantes no podían salir a la búsqueda laboral, siendo que durante la pandemia la escasez de recurso humano en salud pública fue un gran problema y un planteo de la heroica lucha de las y los elefantes.

Las y los estudiantes quedaron a merced de los voluntariados que desenvolvió el gobierno provincial, que fueron los garantes de las campañas de vacunación sin ningún derecho laboral y poniendo un piso de precarización como antesala de la reforma laboral. Los estudiantes fueron muy claros, denunciaron las responsabilidades de Concejo Provincial de Educación, que es quien habilita a establecimientos privados a desarrollar su tarea en la provincia y les habilitan los títulos. Y le reclamaron que se cumplan con programas y plazos, con una lucha muy valiente, ya que sufrían constantes amenazas de parte de las autoridades del Instituto.

Lograron exponer la estafa, difundiendo en redes sociales, con videos y movilizaciones en Las Lajas y Zapala, con conferencias de prensas y campaña en redes sociales. Nuestra compañera diputada del FIT Patricia Jure, presentó un proyecto de resolución para que se resuelvan los reclamos de las y los estudiantes del Instituto Durmare. Se realizaron reuniones de estudiantes y con autoridades del CPE hasta que se logró el traspaso a otra institución para continuar cursadas y las prácticas profesionalizadas en hospitales y la Cruz Roja.

El instituto Durmare quedó fuera de las instituciones avaladas por el CPE y sigue su curso una apelación por parte de la empresa educativa.
Esta lucha expuso los negociados de la educación privada, con la venia del Consejo Provincial de Educación, que reciben subsidios, condonaciones de impuestos y garantizadas ganancias.

Es imperioso reforzar la formación profesional pública y estatal. Con esta victoria, que hay que custodiar, se forjan las nuevas y nuevos luchadores de la salud.