Salud

29/8/2020

Salta: el gobierno reconoce la circulación comunitaria de coronavirus en los principales departamentos

Pero llama a "aprender a convivir con el virus".

El gobierno provincial de Gustavo Sáenz reconoció oficialmente el pasado miércoles 26 de agosto, después de mucho tiempo y de advertencia de los profesionales, que existe circulación comunitaria de coronavirus en los departamentos de Salta Capital, Orán y San Martín, los más poblados de la provincia. Salta ya acumula 2.300 casos positivos y 37 personas fallecidas; la situación de Jujuy está cada vez más cerca.

Al mismo tiempo, el ministro de Gobierno, Ricardo Villada, se encargó de aclarar que de ningún modo se retrocedería en las fases del aislamiento social, en nombre de mantener la actividad económica en funcionamiento. Llamó a aprender a convivir con el virus y cargó nuevamente la responsabilidad de su propagación en la población, diciendo que “está en cada uno de nosotros poder hacer que el virus se propague de una manera razonable y no haga que colapse el sistema de salud”. ¿Como sería una circulación razonable? ¿No está ya colapsado el sistema por el vaciamiento sistemático de la salud pública?

Las declaraciones de Villada reflejan que, como a nivel nacional, manda el interés empresarial. Por eso no se detiene la producción en el Ingenio San Isidro, por ejemplo, donde se registraron la mayoría de los casos del departamento de Güemes. Nos están conduciendo a una aventura que puede ser catastrófica para la población.

Orán y San Martín en terapia intensiva

Los departamentos del norte están en una situación muy crítica y concentran la casi totalidad de los casos fatales. Los reclamos de los trabajadores de la salud ante la falta de personal, insumos y elementos de protección han sido constantes desde que empezó la pandemia, y antes también porque ambos distritos fueron brutalmente golpeados por el brote de dengue y las muertes por desnutrición en las comunidades originarias, que hoy están en peligro por la llegada del coronavirus.

Las respuestas del gobierno provincial frente a la grave situación fueron tardías y absolutamente insuficientes, al punto de que la población ha salido a hacer colectas para proveer de elementos a las hospitales, como tubos de oxígeno. Esta reacción popular frente a la falta de respuesta del gobierno muestra la capacidad de acción y solidaridad de los trabajadores, pero también la perfidia del Estado que a través de integrantes de los comités de emergencia promueve estas acciones para desligarse de su responsabilidad. El gobierno debe garantizar todos los recursos para atender la salud de la población en plena pandemia.

Un programa para la acción

Para el Partido Obrero es fundamental que en los lugares de trabajo y en las barriadas demos la pelea por un programa que imponga las medidas necesarias para evitar los contagios. Es lo que hicieron, por ejemplo, los trabajadores mineros, que con medidas de fuerza impusieron sus propios protocolos frente a la negligencia patronal que provocó una ola de contagios.

Desde hace tres meses nuestro diputado Claudio Del Plá presentó en la Legislatura un proyecto de ley para que se cree un impuesto extraordinario a las grandes fortunas y ganancias, para financiar la atención de la pandemia. Con estos fondos se podría establecer un ingreso de por lo menos $30.000 mensuales para los desocupados y para aquellos que pierden sus ingresos si se vuelve a la fase de aislamiento, una medida necesaria en este momento crítico. Además se podría multiplicar el presupuesto de salud para atender todas las demandas de sus trabajadores y las necesidades de recursos materiales y humanos para atender la pandemia y el resto de las enfermedades que no se pueden atender por el colapso del sistema. Planteamos además que se centralice todo el sistema de salud, público, privado y de obras sociales, bajo gestión estatal y control de sus trabajadores.

Con la energía que ha puesto en movimiento la población frente al abandono estatal, podemos luchar por este programa y triunfar.