Salud

20/5/2022

Semana Mundial del Parto Respetado: una cuestión de derechos y presupuesto

El Frente Ciencias Médicas, UBA

Imagen: Resumen Latinoamericano

Este año la semana Mundial del Parto Respetado, o del Parto Humanizado, se extiende desde el 16 al 22 de mayo y en ella se destaca la importancia de ejercer nuestros derechos. El objetivo principal sería el de visibilizar el modo en que se atienden partos en todo el mundo y exigir el cumplimiento de derechos para las mujeres y lxs niñxs. Sin embargo en la mayoría del sistema de salud nacional, provincial o municipal no se cumple, sencillamente porque nada se hizo desde los gobiernos de turno para darle cumplimiento.

El término “parto respetado” o “parto humanizado” hace referencia al respeto a los derechos de las mujeres y el recién nacido. En esta nota trataremos de hacer un nexo entre el marco legal y la realidad del parto respetado en Argentina.

Para empezar, en nuestro país existe la Ley N° 25.929, que entró en vigencia a partir de 2005 a nivel nacional, sobre Parto Respetado que pretende garantizar el derecho a:

Un parto normal en el que respeten tus decisiones (como por ejemplo: cómo parir, en qué postura, lugar, etc.)
Elegir a la persona que te acompañará durante el trabajo de parto, el parto y el posparto.
Que tu bebé esté en su cuna a tu lado, durante toda la internación (a menos que necesite cuidados especiales)
Que vos y tu familia reciban toda la información necesaria, en un lenguaje claro, sobre tu estado y la evolución del parto y del bebé.
Conocer los beneficios de amamantar y los cuidados que necesitan tanto el recién nacido como vos en esta etapa de la vida.
Conocer los efectos negativos del tabaco, el alcohol y las drogas.

Pero… ¿qué pasa en Argentina?

A pesar de la existencia de la ley en cuestión, la orientación en la privatización de la salud que ha primado junto al vaciamiento de la salud pública vuelven a la ley letra muerta. El “parirás con dolor” católico, está presente en el trato que siempre han recibido las mujeres y forman parte de la violencia obstétrica que se sigue viviendo junto con el elevado porcentaje de cesáreas (que rondan el 38%) la falta de información sobre este proceso, la  patologización de los procesos naturales, entre otras.

Cabe aclarar que la alta tasa de partos por cesárea se debe a dos motivos: negocios y simplificación de un proceso que demanda atención humana, guías y otras cuestiones que no están dispuestos a colocar en los dispositivos de salud.

Según el Hospital de Clínicas “José de San Martín” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, más del 40% de los nacimientos, ya sea en sectores públicos o privados, todavía son por cesárea (cuando según la OMS deberían ser menores al 15%) y la población más afectada por la violencia obstétrica son las pacientes más jóvenes y más pobres

Estas problemáticas no son aisladas sino que están ligadas a una problemática de raíz: el presupuesto. La Ley es un paso adelante si sus criterios se cumplen, y lo celebramos, pero entendemos que igualmente le faltan otras cosas a dicha ley, porque si en un sistema sanitario no discutimos por ejemplo, el problema presupuestario y de personal, las posibilidades de respetar las decisiones de una persona gestante a la hora de tener un parto respetado, puede quedar como una simple expresión de deseo.

La falta de presupuesto tiene responsables, y son quienes claramente quienes nos gobiernan, que pactan constantemente con la “oposición” presupuestos de miseria para distintos sectores, entre ellos, el sistema de salud, con el fin de poder pagar peso por peso la deuda al Fondo Monetario Internacional. Con el FMI no hay presupuesto sanitario posible, ni salario para las trabajadoras de la salud ni para la atención necesaria a este sector de pacientes.

En esta Semana Mundial del Parto Respetado queremos visibilizar las problemáticas que sufren las personas gestantes y sus familias a la hora de exigir un parto respetado así como también que se respalden todos los reclamos que están haciendo las trabajadoras de la salud y los movimientos de mujeres sobre los problemas que enfrentan durante el proceso de gestación, parto y post parto. Organicémonos por nuestros derechos, en defensa de la salud pública, el trabajo genuino y el salario. Presupuesto para salud, no para el FMI.