Salud

4/4/2020

Solo hay 563 camas críticas para toda la provincia de Córdoba

Urge centralizar el sistema sanitario.

El 18 marzo el ministro de Salud de Córdoba, Diego Cardozo, informó en la Legislatura que la provincia podía llegar a contar con 2.500 camas críticas con respirador. Pero el 1 de abril el gobernador Schiaretti publicó un video oficial donde comunica que la Provincia avanzó de 326 a 563 camas con respirador y que el total de las camas “criticas sin respirador” ascendía 750, que se empezaría a construir el módulo hospitalario de emergencia (del gobierno nacional), que habían contratado a 600 profesionales y que pidió autorización para comprar 290 respiradores nuevos.


Un día después, Cardozo expresó que la provincia de Córdoba tenía una disponibilidad de 1.600 camas con respirador, entre las que cuenta las 563 camas anunciadas por Schiaretti, los 290 respiradores que pretenden comprar, y las 763 camas de la salud privada. Esta presentación es tramposa.


Es de público conocimiento que no se consiguen respiradores. La producción nacional de unas 130 unidades por semana ha sido absorbida por completo por el gobierno nacional y la importación está bloqueada. Así las cosas, no se sabe de dónde sacaría el gobierno de Córdoba esos 290 respiradores adicionales.


Por otro lado, la disponibilidad de los establecimientos privados (tanto de las camas críticas como las ambulancias privadas) tampoco se ha concretado. Incluso se han difundido denuncias de que en varios casos las empresas se negaron a tratar o transportar a pacientes infectados con coronavirus, o exigieron un mayor precio por el servicio. La salud sigue siendo un negocio, aun con la pandemia. Para que no queden dudas, las clínicas privadas se reunieron el 2 de abril para unificar la defensa del negocio, un día después del recule del gobierno nacional ante los empresarios del sector.


La conclusión es que solo contamos en toda la provincia con 563 camas críticas para afrontar un pico de contagios, pero eso sin tener en cuenta que antes de la ampliación por la emergencia el promedio de ocupación era del 80%, y que en época invernal la ocupación es plena e incluso se llega a un faltante del 20%.


Según distintas estadísticas, de cada 100 infectados por coronavirus 81 casos son leves, el resto necesita hospitalización y cinco necesitan respirador. El sistema sanitario público de Córdoba (una provincia con tres millones y medio de habitantes) colapsaría si el 0,4% de la población es infectada.


Peor aún es la situación de carencia de la cantidad de personal de la salud. La OMS recomienda 23 sanitarios (médicos, enfermeros y demás personal) cada 10.000 habitantes, pero Argentina no llega a los 10. A este punto nos ha traído el vaciamiento y la privatización de la salud impulsada sucesivamente por todos los gobiernos capitalistas.


Es urgente proceder a la centralización de todo el sistema sanitario y establecer el aumento presupuestario de emergencia para nombrar personal suficiente y disponer de la infraestructura necesaria. Eso además de multiplicar los testeos y avanzar en el tratamiento específico de los infectados. La salida de la cuarentena demanda además la formación de comités obreros de seguridad e higiene en cada lugar de trabajo para garantizar todas las medidas de prevención y poder parar la actividad en caso que se exponga la salud de los trabajadores.


Estas medidas elementales se integran en el proyecto del Frente de Izquierda presentado en la Legislatura, pero que el gobierno de Schiaretti se niega a debatir porque defiende los intereses de los capitalistas por sobre la salud de la población.