Sindicales

9/10/2008|1058

A los trabajadores de Ivisa

No al cierre, no a las suspensiones, no a los despidos encubiertos

Trabajadores del Partido Obrero de San Telmo

Ivisa retira sus ganancias, las fuga del país hacia casinos en Chile. Desmantela y vacía la empresa, dejando despidos y suspensiones que terminarán en otros despidos, como los que levantaron el turno noche. Con los trabajadores más antiguos, ya avisó que pondrá un boliche gráfico, claro que sin capital, sin trabajo y sin organización sindical; que cerrará, salvando nuevamente las indemnizaciones patronales a costo de quiebra preavisada. Y venderá por millonadas el establecimiento. El gobierno no dice nada.

Pero sobre la base de los sueldos miserables del convenio gráfico, la empresa “conformó” sueldos altos con presentismo, premios, productividad y hasta 14 horas extras mensuales gratis de los trabajadores para tiempos de sobreproducción, en medio de una dictadura de seguridad y de regimentación laboral, extendiendo obligatoriamente la jornada laboral con horas extras obligatorias y fines de semana, y apretando los ritmos de producción y estrujando la fuerza de trabajo de su personal.

El sindicato y la interna siempre “le pertenecieron”. La organización sindical sirvió para gestionar y limar asperezas. Ahora espera el desguace con el silencio frente a todos los trabajadores del gremio.

Hay una salida. Rechazar los despidos y las suspensiones y reclamar la continuidad que la patronal boicotea. La empresa se levantó con nuestra sobreexplotación, pero de 2001 al 2007 otra vez nos tiran por la ventana.

Con esa misma fuerza de trabajo que hicieron las ganancias de Ivisa, reorganicemos la fábrica en asambleas con delegados electos y revocables en asamblea, que la empresa abra sus libros y nos muestren sus movimientos bancarios, por una nacionalización sin pago para defender nuestros puestos de trabajo, y una economía social y política que defienda los intereses de los trabajadores y no los de los parásitos capitalistas. Organización y lucha por nuestros derechos.