Sindicales

8/6/2006|949

Acampe permanente en Resistencia


El gobierno chaqueño sumó una nueva provocación contra los aborígenes. El gobernador Nikisch se negó nuevamente a recibir a sus delegados luego de rechazar la posibilidad de una reunión durante todo un mes. El martes 6, Nikisch se negó entonces a recibir a sus veinte delegados que llegaban acompañados por una multitudinaria marcha de aborígenes provenientes desde distintos puntos de la provincia, con el argumento de que “el gobernador no participa en asambleas”.


 


Los aborígenes instalaron un acampe permanente frente a la gobernación y preparan una nueva marcha provincial.


 


Crisis política


 


La marcha a Resistencia obedece a los atropellos y saqueos cometidos por las autoridades del Instituto de Colonización, que han autorizado o ‘tolerado’ la entrega ilegal de tierras en la región del Impenetrable a grupos capitalistas, depredadores del monte y “amigos del poder”.


 


El gobierno tuvo que suspender por 180 días la adjudicación de tierras fiscales.


 


La Fiscalía provincial acaba de dictaminar que, efectivamente, las adjudicaciones de tierras fueron delictivas y pasó a investigarlas una por una, e incluso declaró que podrían ser anuladas. Reclama al gobierno provincial la anulación de las apropiaciones de tierras por parte de sociedades mercantiles o particulares y el “saneamiento” del Instituto de Colonización. Todo esto lo hace el mismo fiscal que durante años hizo caso omiso de las mismas denuncias.


 


El gobierno nacional mandó a Luis D’Elía para ‘mediar’, pero en realidad pretende cooptar a la dirección aborigen, reagrupar bajo su batuta al disperso justicialismo local y alinear a Nikisch en la “concertación”.


 


Organización y programa


 


Los aborígenes levantan un programa que plantea la renuncia del intendente de Río Bermejito por su actitud racista y por haberse robado la ayuda para los inundados de El Espinillo; la restitución y titularización de las tierras a los aborígenes; la separación de las autoridades de Colonización; y la formación de una comisión investigadora.


 


En Resistencia se formó un “Foro Multisectorial por la Tierra del Chaco”, que formó una Comisión Investigadora Popular, la que se ha abocado al estudio de los expedientes y denuncias que llegan desde los organismos y de las distintas localidades.


 


El Partido Obrero del Chaco, que integra el Foro, ha planteado la necesidad de una campaña de agitación y organización en los sindicatos, escuelas, lugares de trabajo y barrios en apoyo de la lucha agraria.


 


¿Intervención estatal?


 


Los diputados del PJ plantean la intervención del Instituto de Colonización, o sea, un recambio de personal en defensa de los mismos intereses.


 


El gobierno nacional, que desembarcó en Chaco para maniobrar a los aborígenes, impulsa, en todo el país, la concentración de la propiedad rural y el desarrollo de los pulpos sojeros. Con pequeñas diferencias, el mismo proceso de violencias contra los campesinos y acaparamiento de tierras tiene lugar en provincias gobernadas por los kirchneristas y sus aliados, como Jujuy, Salta y Formosa.


 


Nikisch entregó el Impenetrable a los sojeros, girasoleros y explotadores de la madera del monte como Indunor. Kirchner es un aliado de los Monsanto, Deheza, Nidera. También de los Eurnekian y Soros que se han apoderado de las tierras chaqueñas. Depende de sus exportaciones para obtener el superávit fiscal que le permite pagar la deuda externa y subsidiar al gran capital.


 


¿Puede incluso preservar el medio ambiente, depredado en el Chaco por el desmonte indiscriminado y por la contaminación de las tanineras, el presidente aliado de las mineras y de Repsol?


 


Confiscar a los terratenientes, gestión obrera y campesina


 


Es necesario que los propios explotados —los trabajadores, los aborígenes, los campesinos, los colonos— tomen en sus manos la gestión del Instituto de Colonización y las tierras fiscales. La gestión obrero-campesina del Instituto de Colonización y de la tierra fiscal, y la restitución de las tierras acaparadas por los grandes capitalistas permitiría abrir la perspectiva de una completa reorganización social en beneficio de las mayorías populares de la provincia.


 


Para impulsar esta lucha común, proponemos la realización de un Congreso de Bases de las organizaciones obreras, campesinas y populares del Chaco.