Por Facebook circula una nota de kirchneristas confesos, que acusan al PO de apoyar la lucha de los Autoconvocados de la Afip en contra de formar una caja complementaria compulsiva sobre la base del descuento de los salarios. La caja, que sería administrada por la burocracia del sindicato, se formaría con un aporte adicional del 0,5 al 4,5% por parte de los trabajadores, por encima del 11% que ya sufren los trabajadores para la Anses.

Lejos de ser una acusación se trata de un “elogio” porque esa oposición es masiva, se ha cristalizado en petitorios y varias movilizaciones, en repudio a esta reducción del salario y al apartamiento del sindicato de su tarea de defender el salario y el 82% móvil.

Si este descuento adicional es una confiscación del salario, el argumento para formar la caja es un ataque a todos los trabajadores porque se dice que la lucha por el 82% móvil es “inalcanzable”. Textualmente dicen que luchar por el 82% harían faltar 153.000 millones de pesos y eso sería ignorar “que esa suma implica ni más ni menos incrementar en un 52% el presupuesto total del Estado y que por más reforma tributaria progresiva que se pretenda es inalcanzable y por “varios ceros” o implica ni más ni menos el equivalente al 80% de las reservas del Banco Central”.

Si para alcanzar el 82% se requieren 153.000 millones de pesos, eso lo único que quiere decir que ese sería el nivel de confiscación del gobierno nac&pop a los jubilados argentinos. Pero exageran la cifra -es un cuarta parte de eso- para condenar de antemano todo intento de conquistar el 82%. Al mismo tiempo se preocupan de las reservas del Banco Central si el dinero va a los jubilados, pero se callan la boca con los millones de dólares que salen de las reservas para pagar la deuda.