Sindicales

17/5/2012|1222

Alimentación: otra gran elección contra la burocracia

Preparemos el plan de lucha por las paritarias

La cifra oficial le da el triunfo a la Lista Verde de Daer con 2.284 votos (64%) contra 1.365 (36%) de la Lista Bordó (PTS, PCR, PSTU). Los compañeros de la Bordó informan que si se descuentan los votos de la obra social y jubilados, el porcentaje en las fábricas se acerca al 40%.


La burocracia de Daer perdió en varias fábricas donde no existe presencia organizada de los agrupamientos que integran la Bordó, lo cual demuestra la profundidad de las tendencias antiburocráticas que recorren el conjunto del movimiento obrero, así como el rechazo a esta burocracia, que dirige el gremio desde 1985.


La Bordó ganó en Kraft (allí se unieron las dos agrupaciones de izquierda) por 422 a 226. Al mismo tiempo, en fábricas de gran magnitud del gremio -donde dirige o tiene una fuerte presencia la izquierda-, la burocracia recibió importante cantidad de votos -como el caso de Pepsico, donde la Bordó ganó por nueve votos, o Stani-Cadburi, donde la Lista Verde se impuso por 114 a 78 votos. Recordemos que en esta última planta, la burocracia postergó las elecciones del cuerpo de delegados por temor a perder. La burocracia también ganó Bonafide, una de las internas integrantes de la lista; en cambio, la Bordó ganó bien en Felfort, por un margen de 30 votos.


El repudio a la burocracia se expresa también en los altísimos niveles de desafiliación al gremio. En las pequeñas fábricas, las que en su inmensa mayoría están dirigidas por Daer, la afiliación es más alta, mientras que en los grandes establecimientos como Kraft o Stani, la desafiliación es masiva. En Kraft, por ejemplo, hay algo más de 600 afiliados, cuando son más de 2.000 trabajadores en la planta. En Stani votaron 200 afiliados en una planta de 850 trabajadores. En un gremio pequeño (con sólo seis mil afiliados y 3.600 votantes), una tarea central pendiente es lanzar una fuerte campaña de afiliación, la que será determinante para derrotar a la burocracia.


Plan de lucha


En las últimas horas ha comenzado un paro por turnos en la seccional que dirige Morán, en el interior bonaerense. Este paro se realiza lunes, miércoles y viernes, con la bandera de 5.000 pesos (28%) de mínimo, que es lo que la Federación nacional ha reclamado en la mesa de paritarias. El rechazo de la Cámara de la Alimentación (Copal), en la línea de la UIA y Cristina (por eso ofrece 22% en cuotas), proviene de una patronal que ha amasado ganancias millonarias en la última etapa y que ahora extorsiona a los trabajadores, al tiempo que pretende una devaluación para mejorar las exportaciones -lo cual asestaría un golpe demoledor a los salarios.


El evidente retraso de los salarios del sector ha sido un acicate decisivo en las elecciones del gremio. Junto a las condiciones de trabajo a las cuales están sometidos los trabajadores conforman un coctel explosivo, el cual ya mostró sus efectos en la huelga general encabezada por los trabajadores de Arcor de Córdoba, quienes en 2010 forzaron el 35% de aumento para todo el gremio.


Así como sucede en el gremio gráfico (donde la gran elección antiburocrática impulsó a varios talleres como AGR, Interpak, Ipesa o Cedinsa a dar batalla salarial, la elección realizada por la Bordó, imponiéndose en 14 fábricas del gremio), esta elección es un mandato para llevar adelante un plan de lucha que supere a la burocracia y le imponga a la patronal y el gobierno un aumento del salario igual a la canasta familiar, así como que se modifiquen radicalmente las condiciones de trabajo. Luego de la importante elección de los gráficos, esta elección refuerza todas las tendencias clasistas y antiburocráticas del movimiento obrero.