Aunque el Astillero tiene su propia paritaria, la conducción Blanca (sciolista) no se pronunció sobre el reclamo de reapertura o apertura de las negociaciones 2015. Patea la pelota para adelante a tono con la “paz social” que quiere Scioli. Tampoco convocó a los trabajadores del ARS a discutir y votar un pedido de aumento salarial. La Blanca se ha empeñado en enfriar toda acción efectiva. 

En el cuerpo de delegados, quienes dirigen la seccional ATE Ensenada y forman parte de la conducción de la CTA aliada a Michelli, propusieron “acompañar” el pedido de un bono de fin de año de 4000 pesos. Pero todo quedó en palabras, porque no hubo una sola iniciativa para darle fuerza al reclamo organizado. No obstante, y anticipando una respuesta de la fábrica, la patronal del Astillero dio un “premio a la productividad” por única vez de 1200 pesos, muy lejos de los 4000 pesos o del doble aguinaldo. Sin asambleas de sector y sin Asamblea General, la conducción Blanca pretende cerrar el año y desactivar cualquier movimiento. Está muy claro que el gobierno echa lastre para evitar la confluencia de los obreros de Astillero con los estatales y docentes. Y más claro aún que la burocracia sciolista se adapta al ajuste. Como puede verse, la alianza entre la Verde de Michelli y la Blanca de Scioli es un acuerdo contra los trabajadores.

Nuestra agrupación tomó posición desde el momento en que supimos de la convocatoria a paritarias “adelantadas” para docentes y estatales. Reclamamos la apertura de la discusión paritaria del Astillero por todas las reivindicaciones y que la fábrica vote un reclamo salarial que recupere lo perdido por la carestía y se ajuste por inflación. La discusión paritaria está teñida por un presupuesto provincial que no contempla el aumento de salarios. La Blanca apoya a nuestros verdugos. 

Todo amerita que se abra la paritaria 2015 sobre todo cuando el 40 % de los trabajadores del ARS se ven afectados por el impuesto confiscatorio a los sueldos. Pero además existe una gran preocupación entre los compañeros por la falta de trabajo y la desinversión tecnológica. Al Astillero no lo va a defender el gobierno que lo vacía (gestión Scavuzzo-Scioli) ni los privatizadores que estuvieron con Menem. Necesitamos recuperar el método histórico del Astillero que conquistó nuestro convenio colectivo en los '70 y frenó la privatización en los '90. Asamblea por sección, asamblea general y unidad con todos los trabajadores.