Sindicales

22/4/2010|1125

Aten: séptima semana de paros

La lucha se profundiza

El plan de lucha de Aten ingresa en su séptima semana, pero esta vez con paro coninuado durante toda la semana, votado mayoritariamente por las asambleas.

Esta decisión fue precedida por un crecimiento en la adhesión al paro y con movilizaciones masivas al ISSN (Instituto de Seguridad Social del Neuquén) y al puente carretero, luego de ser rechazada la “oferta” del gobierno del 5% al básico (75 pesos para el inicial) y cortadas todas las prestaciones de la obra social.

La semana de paro incluye una marcha provincial al ISSN, volanteadas en el puente carretero, reunión de directores y de delegados. La marcha provincial se encontrará con los obreros de Stefani, quienes asistirán a una nueva audiencia en la Subsecretaria de Trabajo.

Sapag no pudo

A pesar de que el gobierno pretendió ganar a los padres contra los trabajadores de la educación con una campaña de desprestigio, el tiro le salió por la culata.

Los medios, sin embargo, no han podido dejar de reflejar que el descontento crece, pero no contra los huelguistas, sino contra el gobierno que no resuelve los problemas de infraestructura, transporte, servicio de emergencias médicas, etc. Los padres juntan firmas, van a la Casa de Gobierno y al Consejo de Educación reclamando soluciones y llaman a no enviar a los hijos a la escuela allí donde haya clases.

Por otra parte, la estrategia de desdoblar la negociación para dividir el conflicto (con auxiliares de servicios) fue un fracaso. Los auxiliares rechazaron la propuesta de 100 pesos en negro.

La dirección boicotea, la base lucha

Las direccion de Aten provincial y de la CTA han hecho un gran esfuerzo por llevar a la mínima expresión las medidas votadas en asamblea. En la seccional capital, no logran hacer pie y el secretario general provincial, Marcelo Guagliardo, ya ni aparece. A más de un mes de conflicto, el paro tiene continuidad, ahora siendo una tendencia de hace casi dos semanas. El método impuesto en el plenario de secretarios generales (una seccional, un voto) distorsiona la representatividad de los mandatos con tendencia a profundizar las medidas.

En la última asamblea, la agrupación Azul y Blanca (Guagliardo) se abstuvo a la hora de votar las medidas de fuerza, mientras 587 asambleístas insistían en continuar el paro por una semana (con cortes de ruta y caravana provincial). La moción de levantar el paro y hacer quite de colaboración recogió apenas cinco votos.

La dirección de la CTA, por su parte, no volvió a convocar a un nuevo paro desde el 1º de marzo, cuando puso todas las fichas en la Legislatura. Días más tarde, los diputados votaron una ley que le permite pagar al Estado la deuda de los aportes al ISSN en cuotas y con bonos.
Mientras los trabajadores de la educación unifican acciones comunes con los obreros de Stefani, la dirección de la CTA mantiene contenidos a los estatales con retiros discontínuos y se niega a convocar a un paro provincial por todos los reclamos.

Más que nunca es preciso convocar a un congreso de delegados de base de la CTA y un plan de lucha que unifique la enorme disposición a luchar de los trabajadores de la educación y estatales, con los padres y los obreros ceramistas.