Sindicales

13/4/2000|662

Atentado y persecución en los supermercados

La semana pasada, en una sucursal de los supermercados Coto de la Capital fue suspendido un trabajador por pegar un volante del Partido Obrero en una pared del establecimiento que denunciaba las condiciones humillantes en que allí se trabaja.


Dos días después, en otro supermercado, varios trabajadores sufrieron una intoxicación por un almuerzo elaborado con productos para devolución. Uno de los afectados exigió al jefe de personal que el hecho fuera denunciado a los gerentes. Como respuesta recibió una amenaza: “Si se enteran, echan al personal de cocina”. A todo esto, el delegado no aparecía desde hacía varios días,


Como dice el volante:


Terminemos con estas condiciones humillantes.