El martes 15 de agosto, alumnos y padres de la Escuela San Carlos Borromeo, del barrio del mismo nombre en Salta, se manifestaron para rechazar el traslado de Nora Burgos, una trabajadora Jefa de Hogar que cumple tareas de preceptora desde hace dos años por 150 pesos. La sanción respondía a la negativa de la compañera a concurrir el domingo 9 de julio a la escuela, para el acto del Día de la Independencia. O sea, un trabajo extra sin remuneración adicional y con el costo de transporte a su cargo.

Por su parte, el Consejo Consultivo la intima a que contrapreste si no quiere perder el plan.

El caso de Nora Burgos, una de las principales activistas del barrio contra los remates, es un caso testigo del brutal grado de explotación al que están sometidos los trabajadores de los planes.

Vamos con todo al paro y a la movilización del 24 de agosto por la incorporación de estos trabajadores a la planta permanente.

El apoyo de los chicos, que se niegan a entrar a la escuela y de sus padres, a esta trabajadora, muestra está recogiendo un gran apoyo popular.