Bahía Blanca: Desplazan al grupo Plaza, pero reprivatizan el transporte público

La decisión de rescindir el contrato al grupo Plaza (75% del servicio) y la posterior adquisición de unidades propias significaron para la Municipalidad nada menos que una erogación de 36 millones de pesos. Las nuevas líneas serán gestionadas por una sociedad anónima, la Sapem (con participación estatal mayoritaria). La 'falta de compromiso con la ciudad' que las autoridades achacan al Grupo Plaza, se ´resuelve' con una sangría financiera enorme.


La amenaza de reducción de subsidios agudizó un vaciamiento que era de larga data. La crisis del transporte en Bahía se inscribe en el derrumbe general de las concesiones y privatizaciones a favor de los Cirigliano, Roggio, Eskenazi y el conjunto de la burguesía 'nacional' y de la otra.


A pesar de la caducidad del contrato, Plaza seguirá prestando el servicio durante dos años más. Mientras tanto, el grupo retiró 14 de los mejores coches, sin ninguna reacción oficial. Plaza demanda al municipio por 80 millones de pesos.


Para el municipio, la gestión de la Sapem debe servir como 'indicadora para la administración del servicio'. El intendente interino, Bevilaqcua, rechazó de plano una municipalización. Una de las líneas retiradas a Plaza (dos de las doce que tenía) ahora es gestionada por la local Fournier, que así amplía su 25% en el negocio. El asesor contable de Fournier es gerente de la Sapem.


Al igual que Ezkenazi en Repsol, Fournier compra las líneas por medio de una deuda que cancelará con futuras ganancias, lo cual implica un vaciamiento anticipado, a costa de inversiones y mantenimiento. Los micros, que compró a crédito, son unidades usadas. Al igual que Plaza, reclama un boletazo, en la ciudad que está tercera en el ranking de transporte más caro (La Nueva Provincia, 18/3). El desmantelamiento potencial se combina con el ataque directo al bolsillo de los usuarios.


La discrecionalidad de gran parte de los funcionarios del FpV, que son mayoría en el directorio de la Sapem, se suma al reciente escándalo del referente de La Cámpora, Rafael Morini, desplazado de su cargo (aunque vuelve al Concejo Deliberante) por traficar mercadería del plan "Carne para Todos".


Estamos ante una reprivatización del transporte público y en la víspera de un boletazo.


El Partido Obrero de Bahía Blanca sostiene que es necesario incautar los bienes del grupo Plaza y abrir una investigación del vaciamiento. Esa investigación debe estar a cargo de usuarios y técnicos independientes. Reclamamos la municipalización total del transporte público, bajo control de los trabajadores y los usuarios.