Sindicales

30/11/2017

Balance de la asamblea general del SiPreBA

Participaron 200 trabajadores del gremio de periodistas.

La Naranja de Prensa

El sábado 25 se realizó una nueva asamblea general del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA). Fue una de las más masivas desde que se fundó el sindicato.


Este encuentro se desarrolló en medio de un salvaje golpe en las redacciones, con 1.500 despidos, desde el cierre de la agencia de DyN al ajuste y las perspectivas oscuras en el Grupo Indalo.


El ataque patronal amenaza llevarse puestos a otros miles de trabajadores, una lista en la que también se encuentran Radio Rivadavia, Del Plata, Vorterix, los medios públicos y también Clarín, La Nación y Página/12, diarios en los cuales sigue abierto el retiro voluntario. Todo esto en el marco de la brutal reforma laboral del gobierno macrista, con amenazas incluso a gremios de inscripción simple como el SiPreBA.


En la primera parte de la Asamblea se trató la reforma de los estatutos. Previamente ya se había alcanzado un consenso, que incluía la creación de nuevas secretarías como las de Previsión Social (jubilados) y Medios Alternativos, la no reelección del cargo de Secretario General y la ampliación de la participación de las compañeras en cargos electivos, entre otros. 


Por eso, el debate se centró fundamentalmente en dos disidencias: la participación de las minorías (reforma electoral) y el lugar de los jubilados en la vida del sindicato. 


Reforma electoral y jubilados


Sobre el primer punto, La Naranja de Prensa defendió la propuesta de que no haya pisos porcentuales para acceder a la minoría, planteó que los primeros tres cargos (Sec. General, Adjunto y Gremial) sean para la lista mayoritaria y los subsiguientes se repartan de forma proporcional (sistema d’Hondt) según el porcentaje de votos obtenidos por cada lista.


Desde la Naranja señalamos, a su vez, nuestras críticas a la otra propuesta, la cual proponía un piso del 20% para acceder a la minoría y un techo en los cargos a distribuir. Esto implicaba que, independientemente de los votos obtenidos por las listas —sea el 20% o el 49%—, siempre se distribuirán los mismos cargos (8, si son sólo dos las listas que se presentan). Se alertó que en ningún caso le correspondía a una secretaría, sino Prosecretarías y vocalías.


La posición vertida en la asamblea por la Naranja buscaba advertir que, con esta última propuesta, se estaba construyendo una mayoría ficticia en cargos directivos. Se expresó que la reforma de los estatutos tenía que estar ligada inexorablemente a una mayor democratización que diera más fuerza para enfrentar con planes de lucha los ataques patronales. Por eso, establecer pisos y techos iba directamente contra esa orientación. 


Por amplia mayoría se impuso la posición contraria a adoptar el sistema d’Hondt. Sin embargo, fue importante explicar en las argumentaciones que la propuesta que finalmente resultó ganadora iba a dejar afuera a otras voces, mientras refuerza el poder a las mayorías. La defensa de una perspectiva más democrática tiene raíces en las ideas fundadoras de nuestro sindicato.


Sobre la participación de los jubilados, desde la Naranja, a la luz del debate y las argumentaciones que se vertieron en la asamblea, decidió bajar su propuesta, por lo que se votó por unanimidad que los jubilados participen activamente de todas las asambleas con voz y voto, independientemente del temario a tratar.


Plan de lucha


En el segundo tramo, la Asamblea debatió sobre los cierres de medios, los despidos y el ajuste en prensa, como así también sobre situación de la clase trabajadora en general. Por unanimidad se resolvió rechazar las reformas laboral, previsional e impositiva —impulsada por el Gobierno macrista y avalada por los gobernadores, ya sean amarillos o kirchneristas— por considerarlas regresivas para nuestras condiciones de trabajo y de vida. También se votó sostener la defensa de nuestros convenios colectivos y estatutos.


Con esa orientación, el SiPreBA votó convocar con cese de tareas y participación a las movilizaciones previstas para el 29 de noviembre (al Congreso) y el 6 de diciembre (a Plaza de Mayo), junto al sindicalismo combativo.


Asimismo, se aprobó impulsar una campaña para que se declare la Emergencia Laboral en el gremio de Prensa, con cese de los despidos por 180 días hábiles y prioridad a la bolsa de trabajo en los puestos que se generen, y expresar la solidaridad con el SAT SAID en la lucha paritaria de los trabajadores de televisión.


Por último, se decidió impulsar la convocatoria a una asamblea de mujeres para febrero de 2018, de cara a la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora del 8 de marzo. Y participar activamente de las acciones por el desprocesamiento de los compañeros y compañeras detenidos por marchar el 1 de septiembre por la aparición con vida de Santiago Maldonado, por mostrar la represión policial.