El intendente de Las Heras, José Carambia (Cambiemos) viene desarrollando una feroz persecución contra los trabajadores y sus representantes gremiales, y especialmente hacia los obreros precarizados de los planes sociales. Esta constante actitud antiobrera pretende ser su credencial para presentarse como candidato a gobernador de Santa Cruz por el gobierno nacional.

Unas semanas atrás, Carambia despidió a la secretaria general de APAP (municipales) Ángela Sánchez, lo que suscitó una movilización de varios sindicatos en su defensa.

Más recientemente, Omar Hernández, trabajador municipal de planta permanente con 15 años de servicios y 5 en el sector del cementerio, fue despedido por llevar adelante reclamos por falta de infraestructuras básicas como baño, agua potable, siendo que lleva a cabo trabajo de insalubridad como sepulturero. Omar llevó adelante un encadenamiento con huelga de hambre en el lugar de trabajo después de haber sufrido el despido, pero el gobierno de Carambia ni siquiera se presentó en la subsecretaría de Trabajo para participar de la audiencia de conciliación. Finalmente, Carambia echó lastre ante la reacción popular y reincorporó al compañero, pero hoy se conoció el despido de otra compañera, Maricela Navarta, del sector electricidad; también precarizada, empleada por el cobro de un plan desde hace cuatro años.

Carambia profundiza el ataque con una restructuración de sectores, atacando a los trabajadores de planes y contratos precarios que se rebelan ante las injusticias. Pretende reemplazarlos con mano de obra aún más barata y precarizada: contratos basura por 3 meses sin continuidad laboral. El reclamo contra esta ofensiva antiobrera está instalado con un acampe a las puertas de la Municipalidad, acompañado por los sindicatos APAP, ATE y otras organizaciones. Allí se encuentran encadenadas cuatro compañeras a modo de protesta.

Desde el Partido Obrero llamamos a rodear de solidaridad esta lucha ante los injustos e ilegales despidos.

Reclamamos una sesión extraordinaria en el Consejo Deliberante con derecho a ser oídos todos los perjudicados; que se retrotraigan todos los despidos y se reincorpore a su sector a cada trabajador.

Ninguna reforma laboral en el Estado municipal. Pase a planta permanente de todos los contratados. Por un convenio colectivo único para toda la administración pública. Salario mínimo igual a la canasta familiar, indexación salarial de acuerdo a la inflación.

¡Viva la lucha de los compañeros municipales!