Sindicales

12/8/2010|1141

CALETA OLIVIA

Empasa en lucha por la continuidad laboral

Guady

Empasa es una empresa de remediación ambiental, creada en 2005 en Caleta Olivia, debido al reclamo de desocupados por trabajo genuino. Como tantas otras empresas creadas para contener nuestros reclamos, dio respuesta al reclamo de trabajo (se realiza remediación en áreas petroleras, aunque bajo convenio de obreros rurales), pero también benefició a los empresarios amigos del poder que se convirtieron en sus dueños.

Las operadoras petroleras (YPF-Repsol, Oxi, Panamerican) han aportado desde entonces. Pero este compromiso entró en crisis y ahora es uno de los temas que se discuten en el marco de la renovación de los contratos petroleros. Si bien en principio todas las operadoras tienen contrato hasta 2017, el gobierno ya prorrogó los contratos a Oxi y Panamerican. Ahora está negociando con Repsol. El gobierno permite la extorsión por parte de Repsol, que plantea no dar más contratos a Empasa, poniendo en peligro la continuidad laboral de 220 trabajadores. No sólo las operadoras están dejando de aportar, sino que durante todo el año la empresa ha sufrido un vaciamiento por parte de sus mismos dueños, que han creado Seave (una empresa de servicios petroleros que también hace remediación, pero bajo convenio petrolero) …

Hablamos con Luis, delegado de Empasa:

-¿Cuál es el principal problema por el cual ustedes salen a la calle?

-Salimos a la calle porque las operadoras se niegan a hacerse cargo de la responsabilidad solidaria y social hacia los trabajadores de Empasa, con la complicidad de los empresarios vaciadores y del gobierno provincial, que dejaron caer a Empa-sa, sin contratos de trabajo desde el 9 de abril de 2010. Al perder el contrato la empresa, los 220 trabajadores pierden las conquistas obtenidas en su momento de una continuidad laboral. Es por esto que nosotros tenemos que salir a reclamar un contrato que ni la empresa ni el gobierno provincial son capaces de resolver.

La empresa ha comenzado a ofrecer el retiro voluntario a pedido de las operadoras y amenaza con que el 25 de agosto finaliza la relación de los trabajadores con Empasa. Los trabajadores lo han rechazado.

-¿Cuál creen ustedes que sería la solución para este conflicto?

-La remediación ambiental es una tarea necesaria y nosotros la venimos realizando eficientemente. El gobierno provincial primero declaró que no le prorrogaría los contratos a empresas que no aportaran para sostener a Empasa y otros emprendimientos, pero luego ‘arrugó’ y no usa los medios necesarios para que la operadora renueve el contrato. Una salida es que el Estado provincial forme una empresa estatal, con la cual se podría garantizar remediación ambiental en serio dentro de los yacimientos, para que genere una estabilidad para los trabajadores (de paso, serviría para que las ganancias se las dejen de llevar los empresarios amigos). Finalmente, es el Estado provincial el responsable de garantizar que se cumplan las leyes de protección del ambiente.

-¿Qué plantea el gobierno?

-El gobierno, hasta el día de la fecha, ha dicho que no puede presionar a Eskenazi (YPF), y de las negociaciones llevadas en capital no ha traído respuestas. Tampoco ha fijado propuestas para las/os trabajadores de Empasa. Y con dicha actitud, sólo justifica a los empresarios locales y las operadoras, dejando a la deriva a los trabajadores. Sólo con un plan de lucha que ha consistido en paros y cortes, manifestaciones, escraches frente a YPF y ocupación de la empresa, hemos conseguido cobrar y tener audiencia con el gobierno para obligarlo a negociar con los trabajadores y no sólo con las patronales como lo venían haciendo.

-¿Cómo sigue esta lucha?

-El 11 de agosto es la audiencia para discutir propuestas concretas sobre la continuidad laboral. Allí reclamaremos que las petroleras no se desvinculen de Empasa y, como alternativa, que el Estado provincial organice una empresa de remediación propia.

El conflicto de Empasa todavía no se resolvió y el gobierno trata de aplicar la receta del desmembramiento de una empresa con mayoría de mujeres, que viene peleando batallas inmensas contra las operadoras y el gobierno.