Los trabajadores de la salud pública de la provincia de Chaco iniciaron paro por 72 horas a partir del lunes 11 contra el brutal ajuste que viene recibiendo el sector en lo salarial y laboral. Con más de 10 años de precarización laboral, con salarios en negro que no llegan ni a la mitad de la canasta de pobreza, con guardias de 16 horas por día, con faltantes de recursos, con al agravante de la pandemia en curso y el aumento acelerado de casos de Covid positivos en la provincia que ya encendió las alertas.

El paro fue anunciado por la Asociación de Profesionales, Técnicos y Auxiliares de Salud Pública del Chaco (ATPTASCH) con una gran adhesión de varios sectores que dejaron sus lugares de trabajo para salir a cortar la calle, debido a la ausencia de respuestas favorables por parte del gobierno provincial de Capitanich al reclamo del pase a planta, aumento de salario y mejores condiciones de trabajo. Desde el servicio de Laboratorio ya adelantaron a los medios que estará suspendido el servicio mientras dure el paro, dado que se sumarán los bioquímicos, técnicos y personal sanitario del área. Sumado a una importante adhesión de otros sectores cansados de la falta de respuestas.

Los trabajadores están pidiendo un suplemento salarial que el gobierno prometió y que solo pagó a los médicos y en negro, dejando afuera al resto de los profesionales de todo el sistema de salud pública. Además, se exige que este monto pase al básico, que sea en blanco y alcance también a los jubilados y retirados del sistema. Otro de los reclamos es el pase a planta para los trabajadores de la salud que hace más de 10 años están en la informalidad, en un contexto de inflación en alza y encarecimiento del costo de vida que está pulverizando los salarios percibidos. Todo esto con la complicidad de la burocracia sindical de UPCP, con José Niz a la cabeza, que no ha movido un dedo frente al ajuste y las condiciones laborales de los trabajadores de la salud.

Es por ello que debemos fortalecer el reclamo. Este paro debe ser una punta de lanza, un ejemplo para todos los sectores, de todos los hospitales y centros de salud en la provincia, para que convoquen asambleas por sector y organicen los reclamos. Venimos de un proceso de lucha nacional y provincial en la salud que ha puesto de manifiesto el ajuste y el derrumbe de los salarios y las condiciones laborales. Es momento de volver a la acción para torcer el viento.