En estos momentos, los trabajadores de Mantenimiento de Ciadea están en quite de colaboración contra el traspaso del sector a la empresa Polimon, subsidiaria de Renault (ver reportaje). Desde abajo, y a pesar de la orientación en contra de la burocracia, se inició un boicot a los representantes de Polimon, negándoles todo tipo de información sobre el funcionamiento de las máquinas o el funcionamiento de la sección.



La ‘tercerización’ planteada en Ciadea es en el sector Mantenimiento, una sección ligada como ninguna otra al ciclo productivo, y es un caso más de ‘tercerización’ trucha, cuya única finalidad es provocar la rebaja de salarios y la ‘multiflexibilización’ en la totalidad de la planta. Los ‘nuevos’ operarios de Polimon cobrarán salarios un 50 % por debajo de los actuales, y serán colocados bajo un nuevo convenio que modificará en forma brutal las condiciones de trabajo. Antelo, patrón de Ciadea, planteó hace tiempo que las plantas establecidas debían contar con las “ventajas” del convenio Fiat. Partir a Mantenimiento del resto de la planta es el primer paso de una ofensiva calculada, cuyo segundo paso será llevar los salarios de Ciadea a los niveles de Polimon u otras ‘tercerizadas’.



La situación de CIADEA se reproduce, con variantes, en otras plantas del SMATA. En Mercedes Benz, los trabajadores que ingresen a partir del 16 de setiembre serán sometidos a ‘nuevas condiciones de trabajo’, es decir a un nuevo convenio cuya discusión puede estar haciéndose en estos momentos a espaldas de los trabajadores. El nuevo personal entraría, según versiones, sin reconocimiento de antiguedad y sin los premios por productividad, lo que significa una rebaja salarial del 50% sobre los salarios actuales.



Para julio, fueron anunciados, además, los convenios con Ford y VW, que se separaron recientemente. VW ha ido más lejos que ninguna otra patronal en el proceso de ‘tercerización’, y serán  “VW y las asociadas (es decir, las ‘tercerizadas’) quienes se sentarán a discutir con el gremio el nuevo convenio, que, tal como está dispuesto el escenario, no tendrá mucho que envidiar al firmado por Fiat”, según informó El Economista del 19/4/96. El propósito patronal, ni duda cabe, es que el salario en VW sea puesto “en línea” con el de las empresas “asociadas”.



La burocracia del SMATA está jugada a extender el convenio Fiat a toda la industria, apelando al desangre de cada lucha y a la perfidia. En Córdoba, posa reclamando el “argentinazo” al Confederal de la CGT, luego de firmar los convenios negreros, hundir la lucha de Ciadea contra los despidos y dejar en el aislamiento la pelea contra la ‘tercerización’. 



Todo esto plantea un frente único del activismo, para organizar asambleas en las grandes plantas automotrices, que voten “nuestra” plataforma de reivindicaciones, frente a la discusión de convenios que la burocracia quiere hacer en secreto, y elegir paritarios. La urgencia en Ciadea es otra: la defensa de la lucha de Mantenimiento plantea la asamblea y el paro hasta expulsar a la Polimon.