Los docentes de la Ciudad paramos nuevamente el 18 y el 19. Durante la semana previa, se instalará una carpa frente a la Jefatura de Gobierno. El paro fue decidido por la asamblea de afiliados de Ademys y por UTE, en su plenario de delegados. A la medida se ha sumado Sadop, que había firmado el acuerdo de 110 pesos de aumento. Para plegarse a la medida, la conducción de este sindicato -alineada con el moyanismo- argumentó que la patronal de docentes privados insiste en descontar los días de huelga.

En UTE, la decisión de parar fue adoptada en un plenario con más de 150 delegados y 60 mandatos de escuela.

Durante el plenario, Eduardo López, nuevo secretario general de la UTE, se encargó de fijar nuevamente en 20% de aumento salarial la reivindicación del paro. Sin embargo, anunció que UTE cerrará un acuerdo si se blanquean los 110 pesos otorgados.

En este contexto, el plenario debatió cómo continuar la lucha. Hubo propuestas de paro por 72 horas. La Rosa respaldó esa moción junto al planteo de una asamblea general. Nos apoyamos en numerosos mandatos que propusieron profundizar las medidas de lucha. La directiva Celeste encauzó la votación hacia la más conservadora de las mociones: paro por 48 horas, recién dentro de diez días (18 y 19 de noviembre). Después de un mes y medio de lucha, este fue el primer plenario convocado por la UTE.

En estas condiciones, la tarea fundamental de la docencia combativa es desarrollar una gran actividad para garantizar la masividad del paro del 18 y 19 y de la carpa.