Sindicales

3/6/2019

Conclusiones políticas del paro del 29 en Rosario

El paro del 29 en Rosario fue contundente como en todo el país. Tuvo acatamiento total en las escuelas de todos los niveles y entre la docencia universitaria, fue muy importante en la industria, la construcción y el transporte, en el centro no funcionó el comercio. Constituyó un rechazo contundente al ajuste de Macri, el FMI y los gobernadores.


El Partido Obrero de Rosario realizó una fuerte agitación a favor del paro en las principales fábricas aceiteras, automotrices y de la alimentación con el volante de la Coordinadora Sindical Clasista, destacando la necesidad de parar contra el régimen del FMI. Esto significa enfrentar todas las medidas antiobreras que en Santa Fe y sus cordones industriales ha resultado en el cierre de 200 empresas y que 240 estén bajo recursos preventivos de crisis, con una caída de 11% del empleo metalúrgico. Esta situación se expresó brutalmente en los 40 despidos en Electrolux y que dieron lugar a una lucha contra el acuerdo entreguista firmado por la UOM que fue defendido por una patota frente al reclamo obrero que solo acompañó la izquierda.


Denunciamos la multiplicación de los “accidentes laborales” producto de la flexibilización de las condiciones de trabajo, como sucede en las aceiteras donde el kirchnerista Pablo Reguera, de la burocracia de aceiteros de San Lorenzo, deja pasar las condiciones brutales de trabajo que imponen las multinacionales. Las suspensiones masivas golpean al gremio metalmecánico, un tema que fuimos a debatir con los trabajadores de General Motors.


Entre los docentes rosarinos denunciamos el pacto fiscal del ajuste que firmaron Lifschitz y Macri, que ha significado una caída del salario real del orden del 15% y una confiscación  que se perpetúa en la paritaria a la baja 2019 que han firmado el gobierno “socialista” y la burocracia de la Amsafe Provincial. En Conicet, a partir de una actividad de la Naranja, desenvolvimos una agitación de denuncia contra el ajuste en Ciencia y Técnica, y la precarización de los docentes e investigadores universitarios que vienen  siendo el blanco de la política privatista y ajustadora que impone el capital financiero.


Tres actos, dos perspectivas


A diferencia de lo ocurrido en el resto del país, en Rosario distintos sectores de la burocracia sindical convocaron a movilizarse, aunque bajo la forma de una movilización de aparato,  sin que exista una deliberación en los frentes obreros, la ausencia de asambleas en los lugares de trabajo atentó contra la posibilidad de que el paro se transforme en un verdadero paro activo.


Se realizaron dos actos y dos movilizaciones distintas. Los sindicatos más abiertamente alineados con el kirchnerismo como la Amsafe provincial celeste, Bancarios, Luz y Fuerza y Correo, agrupados bajo el sello del Movimiento Sindical Rosarino, realizaron un acto donde el conjunto de los oradores llamó a militar y a “ganar la consciencia de los trabajadores para derrotar a Macri en las urnas”, con un llamado explícito a salir de la crisis “votando la fórmula Fernández-Fernández”. Ninguno de los oradores convocó a profundizar las medidas de fuerza, ni a darles una continuidad. Los sectores convocantes forman parte del apoyo a la candidatura gobernador del PJ Omar Perotti.


La otra movilización y acto que se realizó es la que agrupa a los sectores identificados con el 21 F que concurrieron a la Bolsa de Comercio de Rosario.  Participaron la CTA Rosario, camioneros, Ate, Coad (docentes universitarios), la Federación Aceitera y Amsafe Rosario, acompañados de los movimientos sociales papales, fundamentalmente la CCC. Este bloque, por su parte, abona al campo del Frente Progresista y el PS, en la línea “Bonfatti gobernador, Fernández-Fernández a la presidencia”. Los dirigentes del 21F plantearon que la división de los actos se debió a la negativa de los gremios peronistas de cederles el uso de la palabra.  A excepción de aceiteros, que concurrió con una columna de 300 trabajadores, la marcha no superó una convocatoria de aparato.


En el aniversario del Cordobazo, la política de las burocracias sindicales estuvo destinada a un operativo de contención de la bronca obrera en función de un recambio capitalista que continúe con la política de ajuste, hambre, miseria y bajo los dictados del FMI.


El Plenario del Sindicalismo Combativo y el Frente de Izquierda


El sindicalismo combativo y el FIT realizaron un piquete desde la madrugada a la altura del ingreso a Rosario, junto a Amsafe R, despedidos de Electrolux y miembros de la comisión interna de la fábrica La Virginia. El corte que realizamos tuvo una importante repercusión en los medios, permitiendo que se escuche la voz del clasismo durante la jornada del paro. Desde ese corte, el Partido Obrero y sus voceros llamaron a organizar un paro activo de 36 horas con abandono de los lugares de trabajo y movilización, en la tradición del Cordobazo, como un canal para que irrumpan los trabajadores contra el régimen del FMI.


 Luego participamos con una columna independiente en la marcha a la Bolsa de Comercio. La columna del Partido Obrero de Rosario fue la columna más numerosa y aguerrida dentro del bloque independiente. Se destacó la columna del naciente Polo Obrero de Rosario que durante los días previos pintaron sus banderas y armaron sus pecheras a mano, para participar activamente de la jornada unificando la acción de los trabajadores ocupados y desocupados. Luego de movilizarnos y agitar,  realizamos un acto junto al PTS y el MST, en la plaza Pringles. Estuvo ausente Izquierda Socialista, que rechazó participar del acto del sindicalismo combativo, concurriendo al acto del 21F.


En el acto hicieron uso de la palabra despedidos de la lucha de Electrolux, de la comisión interna de La Virginia, de Amsafe Rosario y dirigentes del MST, PTS y el Partido Obrero. Las intervenciones de Luciano Cáceres, sec. Adjunto de AMSAFE Rosario y dirigente del PO, y de Melisa Molina dirigente del Polo Obrero, dieron cuenta de la contundencia del paro y los planteos del sindicalismo combativo y la izquierda. Desde la tribuna se revindicaron las gestas obreras del Cordobazo y de los Rosariazos en contraposición a la regimentación y el colaboracionismo de la burocracia sindical.


La realización de este acto jugó un papel estratégico. Forma parte de la lucha por la independencia política de los trabajadores, por separarlos de la regimentación peronista y frente populistas que se impulsa desde las multisectoriales, que no son otra cosa que acuerdos de cúpulas contra la soberanía obrera, de sus asambleas y de la deliberación de su base. Es por ello que en el acto destacamos que la tarea clave es desarrollar los plenarios de delegados de base, con mandato,  y un el Congreso de la CGT, la CTA y todos los sindicatos, de delegados mandatos, para elaborar un  plan de los trabajadores a la crisis que los convierta en protagonistas políticos y no en furgón de cola del PJ y el PS.


El próximo viernes 7 de junio tendremos una mesa redonda en conmemoración de los 50 años del Cordobazo y de los Rosariazos en Rosario, junto a Néstor Pitrola y el historiador Leónidas “Noni” Ceruti, que abordará a partir del análisis histórico de estas gestas las tareas planteadas para el movimiento obrero en la actualidad.