Sindicales

30/6/2011|1183

Las Heras: Continúa el paro de los petroleros

Contra los procesamientos y la represión

La huelga general de los petroleros de Las Heras lleva más de 15 días. Los trabajadores de Transporte Figueroa siguen sin cobrar, al igual que decenas de trabajadores de Oil, Oleosur, Romero, San Antonio y otras diez. Algunos trabajadores llevan tres meses sin cobrar su salario y todavía hay empresas que deben el retroactivo, la vianda y siguen sin dar respuesta a la continuidad del trabajo, como Huinoil y Quintana Wellpro. En la última semana, la situación de los trabajadores de las empresas en conflicto se agravó, porque las patronales empezaron a enviar telegramas de suspensión y despidos, así como intimaciones para presentarse a trabajar.

Las únicas respuestas que han recibido los trabajadores son el procesamiento de sus principales dirigentes -a quienes, en algunos casos, se les abrieron más de 15 causas ligadas a las dos últimas huelgas- y la intimación del desalojo del piquete de LH3 por parte de la infantería, cosa que no se hizo efectiva en el vencimiento de los plazos.

La huelga sigue y se sostienen los piquetes en los ingresos a los yacimientos, así como el bloqueo a la planta de LH3 de YPF.

El miércoles 22, Peralta realizó un acto de campaña en Las Heras para demostrar una fortaleza que no tiene. Fue una movilización de aparato que no pudo llenar el Centro Comunitario Municipal, a pesar de movilizar micros y combis de todas las localidades del norte provincial. Quienes asistieron dan cuenta que casi no había gente de la localidad. La comunidad en su conjunto, los docentes y los petroleros tenían la expectativa de que el gobernador traería soluciones a los conflictos que se viven y tienen un particular epicentro en Las Heras. Nada de eso ocurrió.

Lejos de recibir o plantear alguna negociación con los petroleros en huelga, Peralta se reunió con los burócratas desplazados del “Chaco” Segovia, quienes vienen realizado asambleas con mínima convocatoria, pero que son de extrema confianza de las operadoras y el gobierno.

Los cerca de 80 docentes y padres que se movilizaron para tratar de entrevistarse con el gobernador fueron recibidos por una guardia de seguridad a empujones y golpes. No obtuvieron respuesta.

Todo esto llenó de indignación a los trabajadores, quienes vieron que Peralta sólo vino a hacer una demostración de aparato en medio de las huelgas que conmueven a la zona. El resto de la comunidad hizo estallar los medios repudiando al gobierno que no trajo ninguna solución.

Los petroleros de Oil tomaron el laboratorio pirolítico en Cañadón Seco y por unas horas ocuparon el casino de Las Heras. Oil y el casino pertenecen al empresario K Cristóbal López.

Los trabajadores de la Uocra local cortaron la ruta 43, permitiendo que los petroleros puedan acceder a los piquetes, lo cual demostró sus intereses comunes en la lucha, planteando las mismas reivindicaciones que éstos en sus empresas.

A esta situación, se le sumó la indignación por la represión a los docentes en Buenos Aires. El jueves a medianoche, se largaron a la calle vecinos y docentes en caravanas de autos y a los bocinazos para repudiar la agresión frente a las intendencias y la gobernación provincial. El viernes hubo movilizaciones en todas las localidades. Las escuelas fueron cerradas por sus directivos en casi todas las localidades. En Caleta Olivia, más de 2.500 vecinos se movilizaron para repudiar las agresiones y apoyar a los docentes.

En este panorama convulsivo se sostiene el paro general de los petroleros de La Heras. El armado de causas contra los delegados y activistas es un intento de vencer la huelga masiva, con lo que se pretende quebrar y regimentar al cuerpo de delegados combativo de Las Heras. Es necesario que se resuelvan todas las reivindicaciones obreras y rechazar los intentos de criminalizar la protesta y los procesamientos a los luchadores. El triunfo de esta lucha es vital para ir por la asamblea general postergada por la intervención, la discusión del convenio colectivo petrolero y las elecciones del gremio.