Sindicales

7/6/2007|995

Continúan la crisis y las luchas

La vuelta a clases no trajo todavía calma para el gobierno; no ha significado un quiebre de los docentes. La mayoría cree que el acuerdo es insuficiente, quiere que se incorpore el presentismo al básico y que se paguen la totalidad de los días caídos.


El descontento se expresó en la movilización del viernes 1, cuando cerca de mil docentes marcharon hasta la puerta del Consejo Provincial de Educación, donde se desarrolla la negociación. Al frente de este organismo se encuentra Silvia Esteban. Como muchos otros funcionarios que mantuvieron su cargo, Esteban viene de la gestión de Sancho.


Las paritarias, una zanahoria


El perfil “dialoguista” de Daniel Peralta no es más que una ingeniería. El acuerdo que ha firmado con ATE habla de la capitulación de su dirección, que de una “apertura” de Peralta. ATE ha suspendido las medidas de fuerza hasta que culminen las paritarias. La paritaria es una zanahoria para parar la lucha.


Las paritarias todavía no han sido aprobadas. ATE no es parte. Las paritarias se realizarán con UPCN y APAP, las direcciones sindicales que fueron escrachadas por los municipales y docentes.


A pesar del acuerdo cerrado con los docentes y ATE, continúa la carpa frente a la Casa de Gobierno.


A Roquel se le fue su Varizat


Esta semana la lucha de los municipales copó el escenario: sigue el paro y la carpa, y hubo una fuerte movilización al juzgado por la destitución de Roque, el jefe de policía responsable de la represión. Por una maniobra del juez Lozada, ligado a la camarilla K, el jefe de policía quedó como querellante de la causa que investiga la represión que él dirigió.


La lucha de los municipales ha tomado un nuevo giro. La mano derecha del intendente radical Héctor Roquel, Fernando Millapel, salió a apretar a los contratados y a bajar línea para levantar el paro en todas las reparticiones. También Roquel se colgó de la zanahoria de las paritarias.


El secretario del gremio, Pedro Biott, brilló por su ausencia estos días. Las decisiones han recaído sobre los delegados de base que sostienen la carpa, y que han derrotado en tres asambleas las posiciones colaboracionistas, y mantienen el paro.


Los activistas municipales de base, luego de reunirse con el intendente, quemaron cubiertas frente a la municipalidad y denunciaron el cambio de frente de Roquel.


Al cierre de esta edición, los municipales votaban la continuidad de la huelga y se conocía la noticia de la renuncia de Millapel, lo que constituye una victoria para los trabajadores municipales.


Política y negocios


Otra perlita de la crisis es la pelea que se está desarrollando a través de solicitadas entre distintos grupos capitalistas. Los testaferros de Kirchner —Lázaro Baez, Cristóbal López y Gotti Hnos.– salieron a atacar a quien se postularía a gobernador por la Coalición Cívica de Carrió y a la interna de la UCR, Eduardo Costa, un capitalista que ha salido a denunciar una “cartelización” en las licitaciones públicas.


El gobierno no ha logrado cerrar la crisis política; gobierna con el mismo gabinete que Sancho y con una provincia sitiada por la Gendarmería.


Kirchner suspendió un viaje al Turbio. El anuncio de la construcción de una megausina y la contaminación que traería asociada, convocaron en Río Gallegos a distintos sectores en una Asamblea Ambiental. La creación da cuenta del proceso que se vive en la provincia: ante cualquier agravio, el pueblo se autoconvoca, debate, vota resoluciones y sale a la calle.


En estas condiciones, en Río Gallegos, se reunió un plenario abierto del FUT-PO, que hizo un balance de lo actuado hasta ahora, discutió los alcances de la rebelión popular, sus incidencias en la situación política y las perspectivas que se abren. Votó una campaña de pintadas, un trabajo de agitación con la declaración política, y el objetivo de llegar a todos los barrios de Río Gallegos.


En Santa Cruz, los trabajadores estamos poniendo en pie una alternativa política que le dé expresión a la rebelión popular contra la camarilla lupinera.