La Fotia ha convocado a un paro azucarero para el 15 de mayo que afectará a todos los ingenios del país frente a la negativa patronal a atender el reclamo de un aumento salarial del 39%, o sea pasar de un básico de 7.700 a 10.740 pesos.

 

Los dirigentes de Fotia señalaron que en la última reunión paritaria los empresarios no llevaron ninguna propuesta, incluso en materia laboral, ya que los sindicatos, aparte del reclamo salarial, también vienen reclamando poner fin al sistema de “tercerización” de los servicios y la recategorización de los trabajadores.

 

El Centro Azucarero Argentino (CAA) se limitó a declarar que en el cuadro de la actual crisis azucarera era imposible otorgar un aumento superior al 35%. 

 

Los ingenios fueron uno de los grandes ganadores de la década. Ahora, la producción azucarera está sacudida por una superzafra que va a agravar todas las contradicciones que se han acumulado en el último período. La caída de los precios internacionales del azúcar ha actuado como un revulsivo y ha condenado a todos los acuerdos e incluso a las últimas leyes aprobadas en Tucumán bajo las cuales se establecían una serie de pautas para impedir que los excedentes se volcaran al mercado interno y hundieran los precios.

 

Precisamente, eso es lo que está ocurriendo, pues los ingenios se niegan a exportar a precios de quebranto, con el agravante de que gran parte de ellos no tienen acceso a la producción de bioetanol, que es una de las salidas que algunos ingenios tienen para volcar sus excedentes.

 

Todo este escenario ha desatado fuertes pugnas entre los ingenios y los cañeros y entre los propios ingenios, sean productores de bioetanol o no lo sean; hay fuertes versiones sobre la posibilidad de que algunos ingenios y sectores cañeros sean empujados a la quiebra y, de conjunto, reclaman medidas de rescate al Estado nacional y a los gobiernos provinciales, además de rechazar las pretensiones de los trabajadores.

 

La burocracia de Fotia ha lanzado el paro, pero no lo está organizando. Ha informado que el 14, o sea un día antes, se vuelve a reunir la mesa de las paritarias. Algunos dirigentes han dejado traslucir que esperan algún ofrecimiento que les permita suspender la medida. De efectivizarse el paro, aunque aún no comenzó la zafra, crearía un cuadro deliberativo al que la dirigencia le huye como la peste y además ayudaría a sacar del aislamiento a varias situaciones conflictivas que se viven en algunos ingenios, como es caso del Bella Vista por el despido de 25 trabajadores o el del ingenio San Juan, por el atraso en el pago de deudas salariales.

 

En función de todo esto, la cuestión clave es organizar el paro mediante asambleas que discutan claramente el pliego reivindicativo y voten la necesidad de un congreso de delegados y un plan de lucha para arrancar los reclamos.