Sindicales

17/7/2020

Córdoba: a los trabajadores del transporte interurbano les deben “150 millones”

Ante la falta de respuesta, la gremial Aoita planteó crear una cooperativa.

La huelga del transporte interurbano de Córdoba, y urbano en el caso de ciudades del interior, se encuentra sin respuestas por parte de quienes gobiernan, mientras las deudas de las empresas al conjunto de trabajadores crecen. Según el sindicato, las patronales deben alrededor de 150 millones en concepto de salarios, aguinaldo y obra social; tampoco se hicieron cargo de cuotas alimentarias y embargos. Todo esto, con la complicidad del poder político.

Esta semana la novedad fue la declaración realizada por Emiliano Gramajo, secretario de la Asociación Obrera de la Industria del Transporte Automotor (Aoita), quien en conferencia de prensa declaró que “los empresarios van a ir por más, no van a poner nada. Van a sacarle plata al trabajador y le van a seguir pidiendo plata al gobierno. Por eso nosotros queremos crear una red de contención contra futuros y posibles despidos masivos”.

“Vamos a crear una cooperativa de trabajo para que cuando alguna empresa no pueda seguir prestando el servicio, ojalá que no, esa empresa se vaya y los mismos trabajadores nos haremos cargo”, agregó en dirigente máximo de Aoita. Este planteo tiene el límite de no apuntar al núcleo del problema, que es la gestión capitalista con una renta empresaria en base a subsidios y precarización del servicio. Esto es el resultado de una complicidad con el poder concedente, que actúa políticamente en sociedad con las patronales.

Además, estas patronales saben que un incremento de subsidios choca con la orientación de déficit fiscal, y que la marcha de la economía no da margen para recibir más subsidios que manejarán a discreción. Por eso, antes de la pandemia, las empresas ya venían realizando recortes de recorridos, despidos y un ataque al salario, movimientos que prefiguraron su actual conducta.

En este marco, la crisis en el transporte es otro argumento de peso para el desarrollo de un paro provincial del conjunto de las centrales sindicales, para que las empresas paguen la totalidad de sus deudas, defender el convenio colectivo de trabajo, y garantizar frecuencias con todas las medidas de bioseguridad.

La huelga indefinida ha puesto de relieve la convivencia de empresarios y quienes gobiernan la provincia y los municipios, en base a la continuidad de un sistema de subsidios -es decir, de la plata de los contribuyentes. que las empresas usan a libro cerrado. Terminar con ese barril sin fondo de los recursos públicos es una tarea elemental, para garantizar el convenio colectivo de trabajo y el derecho al transporte del pueblo trabajador.

En ese sentido, la propuesta de apertura de los libros de las empresas, y la estatización del transporte bajo control de trabajadores y usuarios, es la única salida viable en función de los intereses populares, y para que la crisis la paguen los capitalistas.