El jueves 1º de febrero, el Polo Obrero de Villa 20 (Lugano), junto con otras organizaciones del barrio, cortó las vías del Ferrocarril Belgrano Sur. La medida, que duró toda la jornada, fue en reclamo del cumplimiento de los compromisos contraídos por el Gobierno de la Ciudad a través del Instituto de la Vivienda (IVC). Finalmente, obtuvimos una reunión para la semana que viene. Esta acción fue parte de una lucha que empezamos los vecinos el año pasado con las ocupaciones, la primera de las cuales fue brutalmente reprimida. Lo que exigimos es: entrega inmediata de los terrenos ocupados por la Policía Federal con un cementerio de autos, su saneamiento, la construcción del plan de viviendas y la urbanización de la villa. El compromiso legal por parte del gobierno ya lo hemos conseguido (Ley 1.770) y lo vamos a hacer cumplir.

 

Frente a la irrupción de los vecinos con las ocupaciones, el gobierno y sus punteros trataron de desviar la lucha y engañar a los pobladores. Pero los punteros están en crisis, ya que sufrieron el golpe de la caída de Ibarra, que los llevó a una debacle de la cual no se han podido recuperar ni con el apoyo de los piquetruchos cooptados del gobierno (Libres del Sur, Comedor Los Pibes, Agrupación Martín Fierro, Barrios de Pie, etc.). A esto se suma que la guerra de camarillas en la ciudad afecta su normal reparto de prebendas. En casi todas las villas de Capital se desatan luchas de los vecinos por la tierra y la vivienda que los pasan por encima. Esto, cuando no sufren escarches o movilizaciones de vecinos cansados de la corruptela, la mafia y los métodos patoteriles.

 

El detonante es casi siempre el mismo: el problema de la vivienda, que el gobierno de Telerman no quiere resolver, porque pretende destinar las tierras libres de la ciudad a los emprendimientos turísticos, las megatorres, etc. Para los trabajadores tiene otros planes: la expulsión por la suba de alquileres y terrenos producidos por la especulación inmobiliaria y la ambición capitalista.

 

Las organizaciones que encabezamos y participamos de esta lucha vemos la necesidad de no quedarnos en el plano reivindicativo. Vamos por la conquista de la Junta Vecinal, para echar a los punteros y transformarla en una herramienta de los vecinos contra los planes del gobierno.

 

En las villas de la Capital, el Polo Obrero y el Partido Obrero deben transformarse en la alternativa política de los trabajadores para recuperar las organizaciones barriales.