Sindicales

24/2/2022

Corte en el Pueyrredón: las luchas obreras contra los despidos

Trabajadores de Garbarino, GRI Calviño, municipales de Berazategui, Latam, La Nirva, Línea 60, participan de la medida.

Imagen: Corresponsal.

Trabajadores y trabajadoras de Garbarino, GRI Calviño, municipales de Berazategui, Latam, La Nirva y Línea 60 realizan un corte en el Puente Pueyrredon, Avellaneda, para manifestarse por sus reclamos. Se trata de una acción común en respuesta a los despidos impuestos en estos lugares de trabajo y la lucha contra distintas medidas de ajuste de las patronales, y contra la complicidad del Estado, que volvió a apostar un operativo de gendarmes para impedir el acceso de los trabajadores.

Estos conflictos se encuentran atravesados por despidos generales, como es el caso de la empresa Garbarino donde se cerraron la mayoría de las sucursales, dejando en la calle a miles de trabajadores, o de Latam, donde la empresa incumple el compromiso de reinstalación y continuidad laboral, luego de cientos de despidos; y despidos antisindicales, como el caso de GRI Calviño que ya lleva 40 cesantías, entre ellas varios delegados y activistas, los trabajadores municipales de Berazategui que conformaron su propio sindicato y los choferes de la Línea 60, donde la empresa avanza con despidos y amenaza con cesantear a un trabajador por semana, varios de estos candidatos a delegados, en medio de la puja con el gobierno por los subsidios al transporte.

En La Nirva, las y los trabajadores luchan contra los intentos de desalojo de la Justicia, por medio de una orden emitida en diciembre, que amenaza dejarlos sin su fuente de trabajo.

La respuesta colectiva de los trabajadores es resultado de una coordinación desde los distintos sectores que se ven envueltos en una misma realidad, sin ninguna o escasa colaboración de sus direcciones sindicales y tampoco respuesta de las centrales obreras dirigidas por la burocracia sindical.

Además, trabajadores y trabajadoras son testigos del accionar cómplice gobierno, a través de los ministerios de Trabajo, donde los funcionarios dilatan los conflictos, sin ofrecer ninguna resolución ni emplazamiento contra las patronales, que en general se encuentran violentando varios derechos obreros y regulaciones a la vez.

Junto a los trabajadores participan las organizaciones de izquierda, sindicales y piqueteras, de entre las cuales se destaca una fuerte intervención del Polo Obrero, la Coordinadora Sindical Clasista y el Partido Obrero.

El colectivo obrero reclama respuestas al ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y al gobierno nacional. Muchos de estos despidos sucedieron incluso cuando regía el decreto “antidespidos”, sin que eso impidiera el accionar de las patronales, que actúan en consecuencia a reordenar sus negocios, haciendo pasar una reforma laboral de hecho en los lugares de trabajo.