Sindicales

20/7/2006|955

Coto Rosario: Gran locreada de delegados

Contra las tercerizaciones, los despidos y por el salario

La entrada del pulpo yanqui Wal-Mart en Coto, más de cien veces negada, encubre un ataque feroz a las condiciones de trabajo.


El núcleo de delegados agrupados en Resistencia Mercantil (mayoría de los delegados de Coto en Rosario), plantea la necesidad de unir al gremio en una lucha por las reivindicaciones de los trabajadores. En primer lugar por la estabilidad laboral, pero también por el salario, el pago al 100% los domingos y feriados, y el descanso hebdomadario.


Este núcleo de delegados, junto a sus compañeros, ha logrado la reincorporación de trabajadores despedidos (por ejemplo en la sucursal 99); obligó a pagar el seguro retiro La Estrella, trucho, pero que en Rosario ni siquiera se abonaba; a dar el franco y medio cuando un feriado cae en domingo (algo que sólo se ha conseguido en Coto); a terminar con los horarios cortados de los cadetes y cajeros.


A partir de una férrea lucha para no trabajar los feriados, la patronal se vio obligada a prometer su pago al 100%. El incumplimiento de este compromiso derivó en asambleas en las sucursales 99 y 95, y en dos piquetes, de 60 compañeros cada uno. En estas dos sucursales el llamado a no concurrir los feriados fue cumplido por un 60% de los compañeros. Como consecuencia de esta lucha, Coto comenzó a dar libres los feriados.


Hasta ahora, la conducción del gremio sólo prestó un apoyo “crítico” a esta lucha, que fue más ‘crítico’ que de apoyo, pues no movilizó al gremio.


La lucha para frenar los despidos


Hoy nos enfrentamos a una lucha decisiva, más dura e importante que todas las anteriores: frenar los despidos y pararle la mano a Coto-Wal Mart, la cadena yanqui, considerada la más anti-sindical del mundo.


En este camino se han realizado, con la presencia del sindicato, dos asambleas generales, en dos sucursales, que votaron la colocación de carpas, mesas de agitación, campaña de afiches y toda medida de lucha que sirva para frenar los despidos. En la asamblea de sucursal 95 se le planteó al gremio la necesidad de convocar a una asamblea general.


Resistencia Mercantil, también convocó —en conjunto con la agrupación Combativos Mercantiles, y la Fuba— a las jornadas nacionales de movilización, piquetes y escraches en las puertas de los Coto. Con el reclamo de cese de despidos, no a las tercerizaciones y plata para los sueldos (y no para los despidos), el sábado 8 de julio realizamos una olla popular en las puertas de la sucursal 99.


Locrazo


Con el apoyo del Polo Obrero, la UJS, los delegados del lavadero Virasoro, y otras organizaciones, los delegados de sucursales 99, 95, 96 y 97, arrancaron con la agitación y el locro. Se denunció que Coto oculta su compra por Wal Mart para que no se conozca el plan de despedir trabajadores y para tercerizar maestranza, para fin de mes, lo cual sería el comienzo de un plan más vasto de tercerizaciones.


Un delegado de la sucursal fue sacado a empujones por los matones de la patronal cuando, frente a las cajas y ante el aplauso de trabajadores y clientes, comenzó a denunciar todas estas atrocidades. Al locrazo se sumaron varios clientes; otros aplaudían cuando salían, o saludaban con sus bocinas. El pueblo estuvo junto a los mercantiles, tal como el pasado viernes se ubicó para defender a los vendedores ambulantes apaleados por la GUM y la policía provincial.


Los socialistas del Municipio, en cambio, estuvieron el viernes junto a la GUM y la policía provincial, y son los mismos que durante todo el año permiten que Coto siga facturando cada domingo y feriado, viole el derecho al descanso hebdomadario, despida trabajadores e imponga la esclavitud, los salarios de hambre y la persecución política y sindical.


Por la dirección del sindicato concurrieron al locro tres compañeros; Carlos Ghioldi, una vez más, brindó un “apoyo critico”. La izquierda del gremio, por fuera de Resistencia Mercantil, brindó un escaso apoyo (por ejemplo, el MST, que solía movilizar para estas jornadas, fue con una delegación reducida).


“Consideramos fundamental empezar a movilizar al gremio y ponerlo en movimiento de conjunto, superando las medidas aisladas por establecimiento. ¡Si en los súper tenemos los mismos reclamos! ¿Por qué tenemos que reclamar los trabajadores de comercio separados por empresa? Llamamos a poner el gremio en la calle por las reivindicaciones de los Empleados de Comercio y para pararle la chata a las patronales negreras.


Vamos por las asambleas


El éxito del locrazo obliga a un mayor trabajo de organización.


Un eje es frenar la tercerización de maestranza y prevención, y defender la estabilidad laboral.


Las herramientas deben ser las asambleas, las movilizaciones y los festivales. Debemos hacer conocer la lucha y los reclamos de los trabajadores de Coto entre todos los mercantiles, que en Rosario son más de treinta mil. Muchos de ellos están en condiciones laborales todavía peores; como en La Gallega, donde el sueldo promedia los 450 pesos y no existen delegados, o en los miles de comercios del centro de la ciudad que trabajan en negro.


Debemos transformar la lucha de los trabajadores de Coto en una lucha popular. La preparación de un gran festival de rock, campaña de firmas, agitaciones en la peatonal, para que se les pague a los trabajadores lo que se les adeuda por sábados, domingos y feriados; para que se respete el descanso hebdomadario, se aumenten los salarios y se mejoren el conjunto de las condiciones de los compañeros. A la agenda de Coto-Wal Mart, hay que oponerle la agenda de los mercantiles.


Llamamos a apoyar y desarrollar la campaña de “no compre en Coto los domingos y feriados”. A extenderla al conjunto de los súper. A marchar al municipio y a la provincia para que en forma urgente se impida la apertura de los comercios en los días domingos y feriados, y se frenen los despidos masivos, las tercerizaciones y el avasallamiento a las condiciones laborales.


¡Todos con los trabajadores de Coto! ¡Pongamos al gremio en la calle!