CTA: histórica elección de la Coordinadora Sindical Clasista – Partido Obrero

Gran elecci�n de la Lista 3 en CTA-Capital MARTIN TRESLOBOS

Foto: Martín Treslobos


La Lista 3 de la Coordinadora Sindical Clasista-Partido Obrero ganó, en listas de frente único de la izquierda, en tres provincias – Santa Cruz, Neuquén y Mendoza- y once seccionales; además, conquistó minorías en las directivas de El Dorado, Rosario, Escobar, Vicente López, Matanza, Orán e Irigoyen en Salta, lo que acreditará más de 35 cargos en las directivas de la CTA, ganados como oposición a la Lista 1 de Pablo Micheli.

Las listas 20, opositoras, de frentes de izquierda, que integramos como Coordinadora Sindical Clasista-PO, ganaron Bahía Blanca, Lomas de Zamora y Almirante Brown en la provincia de Buenos Aires. En las dos últimas serán adjuntos compañeros de la Coordinadora. Ganamos dos seccionales en Santa Cruz y se ganaron en frente único varias seccionales de Mendoza, Neuquén y otras.

Además, tres integrantes de las listas opositoras provinciales deben ingresar a la dirección nacional de la CTA, según marca el estatuto: los casos de Santa Cruz, Neuquén y Mendoza.

En la Ciudad de Buenos Aires, la Lista 3 ganó en doce centros claves de los trabajadores de la ciudad, entre ellos, en los sindicatos AGD-UBA y Ademys. Es decir que, de cuatro sindicatos de la CTA Capital, ganamos dos. Incluso, como influencia de nuestros diputados nacionales, entre los trabajadores del Congreso de la Nación sacamos más del 20%.

En aquellos lugares en los que la Lista 3 se presentó, el activismo combativo votó por la izquierda. En la CTA se expresó el fenómeno nacional que hoy preocupa a toda la burocracia sindical y la burguesía: el ascenso de la izquierda y el clasismo en los sindicatos.

Ese giro se dio también con sectores combativos que hasta la elección integraban el michelismo: en Tierra del Fuego, la Lista 1 fue ampliamente derrotada por la Lista 2, encabezada por Horacio Catena, secretario gremial del combativo sindicato docente de Sutef, una reciente ruptura.

Irregularidades

Micheli anunció 300.000 mil votantes, un número inventado. Publicó que sacamos un 11%, otro invento. No hay cifras generales, en el marco de una elección raquítica.

El michelismo no abandonó las viejas prácticas burocráticas. Impugnamos la elección completa de la provincia de Tucumán, La Rioja, Florencio Varela y Hurlingham-Ituzangó, donde las juntas locales impidieron la fiscalización: un fraude bochornoso. Para enfrentar estas prácticas la Lista 3 reunió 3.726 fiscales.

Allí donde la Lista 3 fiscalizó, el total de votantes fue escasísimo (entre el 5 y el 10% del padrón), como en CABA, La Plata-Ensenada o Matanza. Se demostró que las votaciones masivas anunciadas por la CTA son un inflado impresentable.

Mendoza y Santa Cruz

La Lista 2 de Mendoza, integrada por la dirección de ATE en ruptura con el michelismo secundada por el PO, se impuso en la provincia, y la Lista 3 le ganó a la 1, en la votación de orden nacional, con el 85% de los votos en esa provincia.

En Santa Cruz ganó la provincial 2, también independiente del michelismo. La Lista 6, encabezada por una compañera de la CSC-PO, ganó en la estratégica Río Turbio, y lo mismo en Gregores. En Caleta Olivia, la Lista 6 de la CSC-PO perdió apenas por 20 votos.

Neuquén: Micheli legaliza al fraude y la patota

En Neuquén, cuando se habían escrutado apenas el 50% de las urnas, que ya confirmaban el triunfo para la Lista 2 de las direcciones zonales del Norte (Chos Malal, Andacollo), el Sur (San Martín, Junín, Villa La Angostura, Piedra del Aguila), Zona centro (Cutral-Có, Plaza Huincul, Picún Leufú) y Zona Este (Rincón de los Sauces) y con una diferencia provincial de 300 votos a favor, la delegación de la Junta Electoral decidió unilateralmente suspender la carga de los datos de las actas de escrutinio.

Una patota del secretario general de ATE, Carlos Quintriqueo, kirchnerista y socio del gobernador Sapag, impidió la finalización del escrutinio al día siguiente, armada de palos y armas blancas y de fuego. Los métodos de Pedraza y Pignanelli.

Micheli declaró que la oposición debía aceptar el triunfo del K de Neuquén. Desde la Lista 3 llamamos a una gran movilización nacional en defensa y en resguardo de la voluntad expresada por estatales y docentes en las urnas.

Conclusiones

En primer lugar, la elección, que tenía la función de frenar la división de la central, la agravó más aún, y puso de manifiesto una nueva grieta entre De Gennaro, Lozano y Michelli como se expresó en las elecciones de Neuquén. En segundo lugar, sectores de luchadores hicieron un balance crítico de la adaptación de Micheli a Moyano y Barrionuevo (paro dominguero). Varios de ellos integraron o apoyaron las listas de la izquierda. Otro sector, como ATE Mendoza hizo un proceso más profundo de superación del peronismo, de balance definitivo con la experiencia del centroizquierdismo sindical que primero se adaptó a De la Rúa-Chacho Alvarez, luego al kirchnerismo y clavó el último clavo contra toda idea de un partido de trabajadores basado en la central cuando apoyó a Binner. El papel del PO y del Frente de Izquierda en el cuadro político y del movimiento obrero ha sido el mayor factor de atracción, reforzando el papel ganado por los activistas clasistas en las luchas y en favor del método de la huelga general con la que ganaron los docentes, opuesto por el vértice a los métodos de la burocracia y la centroizquierda.

La lista del MAS y Lerer pagó con una votación marginal su rol divisionista en la izquierda. El abstencionismo del PTS e IS fue criminal, especialmente en el caso de Neuquén. Fueron completamente funcionales a la burocracia sindical michelista y/o yaskista, al punto que el sindicato ceramista apoyó nuestra lista. La base de Ademys y de AGD fue clara, votó a la Lista 3.

Los 1.200 candidatos, las victorias seccionales y provinciales, los miles de fiscales, el desplazamiento de luchadores de la central a la izquierda clasista, muestra el acierto de la gran campaña realizada. El movimiento obrero cuenta en las nuevas seccionales clasistas con un instrumento para desarrollar sus luchas ante la disgregación y defección de todas las alas de la burocracia.

Daniel Sierra