Sindicales

12/2/2015|1350

Cuenta regresiva y crisis en Buenos Aires

Cumpliendo fielmente lo acordado por su ministra de Economía con funcionarios de ocho provincias, el gobierno de Daniel Scioli ofreció un incremento de alrededor del 17% en dos cuotas. Lo suman con el aumento de enero para dibujar un 25% por todo el año y en tres cómodas cuotas.


 


La "oferta" de la reunión del 9 de febrero fue una verdadera burla, que descolocó a los burócratas sindicales del Frente Gremial (Suteba-FEB) que debieron salir a rechazarla de plano, a pesar de todas las expresiones de buena voluntad. Es que dos cuotas de 80 pesos al básico en marzo y agosto para el cargo testigo de preceptor (88 pesos para el maestro), y una cifra remunerativa y no bonificable de 480 en marzo, y 200 en agosto, es una miseria realmente intragable. El sueldo de bolsillo con que el gobierno considera que los docentes debemos conformarnos llegaría para el preceptor a 5.478 pesos en marzo y 5.741 en agosto, y para el maestro de grado 5.860 pesos en marzo y 6.252 en agosto. Los profesores quedan muy por debajo de esto, y recién cobrarían en abril y septiembre, respectivamente.


 


Las direcciones sindicales que aún a mitad de febrero siguen elogiando "que el debate salarial empezó con tiempo", sólo llegaron con el planteo de máxima por parte de la FEB de considerar el aumento de enero a cuenta de 2014, sin definir porcentajes. Este simple planteo, y el tope del 25% del gobierno, ha colocado a la paritaria en una crisis. Vuelven a reunirse el 18 de febrero, a escasos 12 días del inicio de clases del 2 de marzo.


 


Mientras tanto, está anunciado que se reunirá la paritaria nacional, donde el libreto del ministro Sileoni y de Cristina Kirchner, es el 25% de tope. Es bastante difícil que los gremios nacionales puedan aceptarlo, porque eso condicionaría los reclamos de sus mismas direcciones en las provincias, donde chocan contra el descontento en la docencia por la licuación virulenta del salario.


 


La contradicción entre la necesidad del gobierno nacional y de los provinciales, en todas sus expresiones, de llegar a las elecciones sin conflicto con la docencia y el techo salarial y porcentual que quieren imponer en una paritaria que no puede posponerse por su "estacionalidad", y que en los hechos se convierte en paritaria testigo, hace que aún con la rueda auxiliar de las direcciones docentes declaradamente oficialistas, les cueste mucho cerrar un acuerdo. El fantasma del no inicio empieza a sobrevolar las principales jurisdicciones, como Buenos Aires y Córdoba con una enorme autoconvocatoria.


 


Las seccionales y agrupaciones combativas nos hemos dado un curso de acción para organizar medidas de lucha, incluyendo el no inicio de las clases. El lunes 23 se realiza un plenario de la oposición docente nacional, y desde el 24 al 26 en Buenos Aires, un plenario provincial de delegados con mandato.


El VII Congreso Nacional de Tribuna Docente, que reunirá a 800 docentes de todas las provincias el 21 y 22 d


febrero en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA (Santiago del Estero 1029), discutirá la situación de conjunto y en cada lugar, tomando resoluciones para desenvolver medidas de lucha, y para extender y profundizar la presencia de la agrupación clasista, luchando por desplazar a la burocracia de los sindicatos docentes. Bajo la consigna "Construimos una salida ante el derrumbe educativo", nos preparamos para defender una alternativa obrera y socialista para la educación y la docencia.